Según el «Breve diccionario etimológico de la lengua castellana» (1973), de Joan Corominas, «carnaval» se registra en el uso de los hablantes desde 1495. Procede del vocablo italiano «carnevale», que es una haplología (disminución de una sílaba) de «carnelevare» (quitar la carne), porque después del periodo de carnaval los fieles de algunas religiones empiezan el ayuno de la Cuaresma o tiempo de penitencia que se desarrolla en un lapso de 40 días, durante los cuales suelen abstenerse de ingerir carne.