La pandemia del COVID-19 también ha puesto en la “unidad de cuidados intensivos” a los espacios de entretenimiento de Las Peñas y el cerro Santa Ana, y en muchos casos no lo han soportado. La situación por la crisis sanitaria sigue siendo crítica para los establecimientos, que contra todo pronóstico se aferran a mantenerse en pie.
“La actualidad del barrio (Las Peñas) y su característica bohemia hoy en día es nula, ya que después de la cuarentena los sitios de diversión como bares, teatros y restaurantes comenzaron a tener aforos muy limitados y unos hasta la actual fecha no han podido abrir”, dijo Juan Pablo Toral, escultor y residente del barrio.
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Según Toral, “la Vinoteca después de varios meses de permanecer cerrada aún ha logrado mantenerse y atender al público, y es prácticamente el único sitio que está abierto de martes a sábado”.
“Poco a poco se apaga la empedrada calle Numa Pompilio Llona, que fue testigo de una ciudad cálida y encendida que gracias a sus turistas que la visitaban asiduamente llegó a ser un ícono de Guayaquil”, agregó.
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Toral considera que la Empresa de Turismo de la ciudad “está en capacidad de reactivarlo, ellos saben cómo hacerlo porque tienen la capacidad para ello”. “La calle Panamá, por ejemplo, se la está rescatando con eficiencia, aquí los residentes del lugar estamos prestos a fomentar una calle llena de vida y cultura para el turismo de Guayaquil”, expresó.
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En ese sentido, el pedido unánime a las autoridades de quienes dan voz a estos espacios es que se flexibilicen las restricciones, principalmente en cuanto a los horarios. Son conscientes de lo primordial que es la salud, por lo que garantizan el cumplimiento de estrictas medidas de bioseguridad en sus locales.
Casa Cino Fabiani
En la unión está la fuerza, reza un dicho popular y este ha sido aplicado por la Casa Cino Fabiani, ubicada en Las Peñas. “Nos aventuramos junto con mi equipo, Alejandro Fajardo, José Andrés Caballero, David Morejón, mi productor de campo, Lucho Mueckay, tenemos que trabajar...”, dijo Arnaldo Gálvez, productor del espacio.
Presentada en el 2017 y 2019, permitió a los fanáticos revivir la experiencia con Dignidad, una pieza de corte político. “Decidimos replantear la puesta en escena con el director chileno-mexicano Sebastián Sánchez Amunátegui. En escena estaban Fajardo y Caballero. La puesta en escena se realizó en el Estudio Paulsen”, explicó.
Gálvez dijo que de esta situación por la pandemia “vamos a salir juntos en el ambiente artístico”. Cree en el trabajo en equipo, en la coproducción. “Como bien dice Marlon (Pantaleón, director ejecutivo de Estudio Paulsen), nunca hemos sido competencia, sino más bien somos amigos y nos apoyamos y espero que esta coproducción sea el comienzo de muchas otras”, añadió Gálvez refiriéndose al trabajo entre Casa Cino Fabiani y Estudio Paulsen, con Dignidad, que está previsto que vuelva a escena el 19, 20, 26 y 27 de marzo en el Estudio Paulsen.
Asimismo, estimó que a pesar de las complicaciones, incluso de que económicamente sea rentable, si algo “es valioso y tiene contenido” debe salir adelante. “Nos jugamos la vida porque creemos firmemente que el arte es fundamental en la existencia del ser humano y la lección que me deja (la pandemia) es que lo más valioso ahora es seguir adelante y saber cómo manejar el tema del virus. Definitivamente esto no se va a ir, nosotros tenemos que seguir trabajando y hay que hacerlo con mística y devoción”, aseguró.
Según Gálvez, “el barrio Las Peñas podría ser un poquito más cuidado por parte de las autoridades municipales y turísticas, más iluminación, mayor cantidad de guardias privados, lamentablemente estamos viviendo en tiempos de zozobra delincuencial y las áreas cambian rotundamente cuando comienza la parte privada llamada Puerto Santa Ana...”.
Estudio Paulsen
Estudio Paulsen forma parte de los establecimientos con oferta cultural que se encuentran en Las Peñas. Tras el cierre en marzo del 2020, reabrieron sus puertas en julio-agosto con clases de la tercera promoción y se graduó un grupo de alumnos en diciembre. En octubre presentaron la obra Medardo en casa, en conjunto con el Teatro Centro de Arte, mientras que en diciembre Mary para Mary. “Fue un regreso bueno, la sala estuvo llena, tuvimos buena asistencia a pesar de la pandemia, en el TCA con la obra Medardo en casa y en el Estudio Paulsen Mary para Mary”, dijo Marlon Pantaleón, director ejecutivo del espacio.
Si bien por estos días del año pasado la incertidumbre era la que primaba, y aunque el panorama sigue por esa misma línea ahora hay un poco más de certezas. “Estamos viviendo, trabajando el día a día. Siendo mucho más cautos en lo que estamos haciendo, no porque se hayan cometido errores sino porque se pueden venir eventos que están fuera del alcance de nuestras manos, todo es posible, y con ese panorama también estamos trabajando y tratando de alzar cabeza aquí en el barrio Las Peñas”, afirmó Pantaleón.
“El barrio Las Peñas ha sido un barrio turístico, un barrio modelo, artístico, con varios locales que se han cerrado; el Estudio Paulsen se mantiene abierto, dando talleres semipresenciales y talleres de actuación en línea también...”, agregó.
El interés por reactivarse se mantiene patente, que es una aspiración compartida, según Pantaleón, con los actores y productores locales.
Rayuela
Rayuela estuvo cerrado un mes al inicio de la pandemia y luego optaron por hacer delivery. “Al principio que entramos en esa faceta no estuvo mal, ya después cuando permitieron recibir comensales también abrimos con todas las medidas de bioseguridad... El negocio no estuvo tan mal hasta el mes de diciembre del año pasado”, comentó Alejandro Bolaños, propietario de Rayuela.
Sin embargo, las medidas tomadas “fueron nefastas” y al no encontrar otra alternativa “están pensando seriamente en cerrar definitivamente el negocio”, dijo a inicios de este mes Bolaños. “Lo que hicieron en diciembre nos golpeó demasiado, teníamos un año a pérdida prácticamente y diciembre era el mes en que ya empezábamos a facturar bien, pero con las medidas que tomaron tuvimos que cerrar desde el 15 de diciembre hasta el siguiente año”, sostuvo.
De acuerdo con Bolaños, últimamente han venido medidas que no han facilitado ni ayuda, y alejan al consumidor. “Primero con esto de no poder vender tragos en Guayaquil, eso hizo que todo el público por un buen tiempo solo vaya a Samborondón. El trago en realidad es el que mueve todo, en los restaurantes, bares... Todo tipo de negocio que esté en la gastronomía se mueve igual mucho por el trago, porque una persona se toma una cerveza, una copa de vino. No estamos hablando ni siquiera de destilados o tragos más fuertes, ni hablar de bares ni discotecas, que ellos ni siquiera pueden operar...”, señaló.
Asimismo mencionó que luego se flexibilizó la venta de “tragos”, pero con horarios muy restringidos. “Somos una ciudad que ha estado acostumbrada a salir hasta tarde o salir recién tarde...”, dijo.
En ese sentido, Bolaños indicó que Rayuela estará cerrada hasta abril y que están analizando si se abre o no, sobre todo si este mes no mejora en términos de medidas cerrará definitivamente. “Yo no voy a volver a abrir con un horario de las 22:00 que a mí no me sirve para nada. Aparte de que el sector está olvidado totalmente. No ha habido ninguna acción municipal o gubernamental para activar lo que antes era el corazón turístico de la ciudad. Además de que no hay turistas en la ciudad actualmente, nosotros también vivíamos de eso, de los turistas que iban a conocer la única parte colonial de Guayaquil...”, apuntó.
“No es de plata ni siquiera de promoción, no es de nada por el estilo, no es de que un funcionario público venga a hablarme y darme ánimos, se trata de que pongan restricciones y seguridades que sean lógicas para que los clientes se muevan...”, expresó.
Bolaños es consciente de que el tema de la salud es importante, hay que precautelar y por ello destacó que los restaurantes y restobares son los que más mantienen el aforo, los cuidados, y considera que el “contagio en realidad está en las parrilladas de la casa, en las reuniones familiares. El contagio está en lo que la gente está haciendo porque no puede asistir a lugares públicos...”.
Establecimientos cerrados en Las Peñas
El bar Arthur’s, La Paleta, así como Mondo Café son algunos de los que dado el diagnóstico crítico decidieron cerrar sus puertas, dejando para el recuerdo grandes momentos que allí vivieron sus dueños y clientes.
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Arthur’s cerró en junio del 2020, luego de 21 años de servicio; La Paleta inició su historia en el 2003 y llegó hasta finales del año pasado; y Mondo Café nació el 14 de febrero de 2020. Este último, una vez que se declaró la cuarentena estricta cerró sus puertas el 17 de marzo y reabrió sus puertas el 1 de julio, pero el oxígeno no fue suficiente y a finales de enero del 2021 no le quedó otra opción que concluir con su historia.
Mondo Café
La falta de clientela es una de las razones por las que Mondo Café tomó la decisión drástica, según su propietario Víctor Riera, quien además es guía de turismo. “No había casi movimiento y más que nada porque el local de nosotros estaba enfocado hacia el extranjero”, dijo.
Añadió que a esas dificultades se sumó que el ingreso de clientes por el lado del Malecón hacia Las Peñas estaba cerrado, con lo cual solo llegaban el 25%, y que el dueño del establecimiento “nunca quiso bajar el arriendo, mantuvo el mismo precio sabiendo que no había clientes... (aunque reconoce que el dueño del local no les cobró durante dos meses). Trabajamos todo el tiempo a pérdida...”, afirmó.
Además lamentó que las autoridades no hayan tenido un acercamiento. “Nunca tuvimos un acercamiento ni del Ministerio ni del Municipio en querer preguntarnos, ‘bueno, ¿cómo podemos ayudarlos?’, ¡nunca! Entonces si no hay personas preparadas para eso, nunca va a funcionar nada”, aseguró.
La posibilidad de volver a abrir, según Riera, si es que se da, “no sería este año y tampoco sería en el mismo lugar”. Además tenía planes, había hablado con gente de los cruceros para que los turistas hicieran una cata de productos ecuatorianos como vino, comida, café y chocolate.
Panorama en el cerro Santa Ana
Una de las razones por las que se sostiene Diva Nicotina, según Norman Recalde, encargado de los eventos y espectáculos del espacio, es porque el dueño de casa ha sido muy comprensible en cuanto al cobro del alquiler, pero como inquilinos saben que tienen una responsabilidad que cumplir. “Siempre diré que nuestro fan número es él... No hemos tenido esa clase de casero que nos cogen y nos mutilan por no tener el dinero...”, dijo Recalde.
Diva Nicotina es un bar-rock que genera música nacional e inédita independiente, así como rock clásico de los 70, 80 y 90, por lo que el público estaba acostumbrado a lo largo de estos casi 20 años a ver espectáculos con banda, pero actualmente debido a la “petición real del COE nacional de poner dos shows acústicos ha permitido bajar un poco” y a ello se suma el “detalle del aforo”. “Nosotros tenemos una capacidad para 200 personas. En un concierto a full, sin mesas ni nada, podemos meter hasta unas 250-300 personas. Con el tema del aforo, máximo podemos tener unas 40 personas y no más...”, explicó.
De acuerdo con Recalde, la misión de Diva Nicotina es que “no muera la música”, por lo cual están conversando con los músicos que los ha apoyado en escena para mantener los shows acústicos, de tal manera “que se pueda subsistir”. Asimismo señaló que se ha “inventado” una nueva escena para que la gente tenga como “temática” y se trata del acustic rock.
“Nos gustaría tener la presencia de la alcaldesa para poder conversar con ella, no solo Diva sino todos los que estamos en el cerro y llegar a un acuerdo mutuo, en donde podamos ver muchos pros y contras, en qué nos pueden colaborar, no necesariamente que sea económico... Nuestro llamado siempre va a ser pacífico, nunca va a ser agresivo, nunca va a ser un llamado activista... Queremos la única respuesta de por qué nos ha abandonado, eso es todo...”, manifestó.
Aseguró que “Diva Nicotina se mantendrá firme... Estuvimos cerca de caernos, pero Dios es grande y siempre nos ha mantenido fuertes, nos ha dado salud más que nada, sabiduría para seguir. Hemos afrontado adversidades, tuvimos el fallecimiento de uno de nuestros fundadores, Eduardo Jurado Peralta...”, comentó.
El Rincón del Cerro
Según Mariuxi Mena, administradora de El Rincón del Cerro, escalón 27, siguen en marcha desde agosto del 2020, pero con la nueva modalidad sugerida por las autoridades, como restobares.
Sobre los cambios a su local, Mena señaló que fue muy duro. “Tuvimos que cambiar un poco la infraestructura porque como éramos bares, tuvimos que cambiar luces, hacer adecuaciones. En mi caso tuve que sacar mesas para que haya distanciamiento... Nos impusieron que teníamos que vender comida, piqueos, a todas las personas que ingresen a nuestro negocio y no pueden ver las mesas con licor si no hay un plato de comida servido, cosa que es un poquito molestoso para la persona que viene, puesto que ya muchos vienen de comer y solo, en mi caso yo presento shows en vivo, quieren escuchar música, tomar un par de cócteles...”, dijo.
De acuerdo con la propietaria, de un 100% de ganancia, ahora están con un 20%, y “eso a veces”. “La presencia de gente ya no se da, porque piensan que en el cerro estamos cerrados, cosa que no es así, nosotros estamos trabajando pero como restobares, por eso es la publicidad que nosotros necesitamos para que la gente nos conozca y sepa que nosotros estamos atendiendo totalmente, con todas las medidas de bioseguridad para que puedan sentirse tranquilos, y más que nada con el aforo que es para cuidarnos nosotros y a nuestros clientes”, sostuvo.
En cuanto a la seguridad en el cerro Santa Ana, Mena comentó que cuentan con la policía de turismo, que ha sido coordinado por la concejal Nelly Pullas. “Estuvo en el cerro, nosotros le hicimos esa petición y ella habló con la policía, nosotros tenemos policía permanente, a veces hay más policías en todo lo que es el cerro... Aparte también contamos con guardias de civiles enviados por el Municipio, que ellos están cuidando que nosotros cumplamos con las medidas de bioseguridad y por cualquier desmán que pase, ellos enseguida se comunican con la policía y la policía está al instante”, explicó.
“Gracias a Dios ya detuvieron a algunas personas del cerro de al lado, que es el cerro del Carmen, que eran los que nos hacían dar terror a nosotros, pero ya no se escuchan esas cosas...”, expresó.
Uno de los pedidos a las autoridades es que se flexibilice el horario, se extienda el horario de atención hasta la 01:00 y vender bebidas hasta las 00:00. “Nos ayudarían mucho, yo sé que por la pandemia no podemos exigir más de lo que nos están dando, pero de verdad nos están matando con esto, en el cerro ya han cerrado muchos negocios...”, añadió.
Bares cerrados en el cerro
Mena también tenía Mookambo Karaoke (que estaba en el escalón 18), fundado hace 13-14 años, pero tuvo que cerrarlo apenas se inició la cuarentena. “No lo pudimos abrir, está totalmente prohibido lo que es karaoke y como era un lugar más pequeño, para tener tres o cuatro mesas con el distanciamiento que nos pedían no me convenía y no era negocio abrirlo, lo tuvimos que cerrar”, explicó.
Sabú Bar
Sabú Bar, que estaba en el escalón 40, inició su historia para las fiestas julianas del 2004 y su final en enero de este año debido a las restricciones, según Isabel Barrera, propietaria del local junto con esposo, Reinaldo Caamaño. Trabajaron hasta el 13 de marzo de 2020 y reabrieron en octubre, pero como restobares.
“Cerramos porque las restricciones del COE nos han matado poco a poco. Sabú Bar contaba con todas las medidas de bioseguridad y siempre contamos con todas las medidas contra incendio, alarma, todo lo que nos han venido pidiendo durante tantos años lo hemos cumplido, pero realmente si no nos permiten ni una sola cerveza sin un plato de comida, poco a poco nos van matando”, señaló Barrera.
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“Si las cosas empiezan a normalizarse”, Barrera no descarta la posibilidad de reabrir Sabú Bar. “Obviamente ya no como antes, lo sabemos a la perfección, pero que sean un poco más flexibles...”, dijo.
Según Eddy Albán, coordinador de la Asociación Cerro Santa Ana, de los 26 bares que hay a lo largo del espacio en total 13 se han cerrado. Y hay malestar entre los propietarios “por los malos comentarios hacia” el cerro. Y reiteró que cuentan con seguridad de la policía, así como la del Municipio. “Estamos pidiendo a la Alcaldía que nos abran las puertas del Malecón para que la gente pueda pasar, porque la gente no puede pasar”, afirmó.
Gloria Gallardo, presidenta de la Empresa Pública Municipal de Turismo: Estamos conscientes de las dificultades que están atravesando los espacios de entretenimiento
La presidenta de la Empresa Pública Municipal de Turismo, Gloria Gallardo, aseguró estar consciente de las dificultades de los espacios de entretenimiento y han estado trabajando con ellos para reinventar su actividad, para que puedan sobrevivir a través de la adaptación a esta nueva realidad.
¿Cuál es el diagnóstico que tiene la Empresa sobre Las Peñas, en qué estado se encuentra este momento?
Se considera, según todos los estudios económicos, que la actividad turística y de entretenimiento ha sido el sector más afectado por la pandemia. Y en lugares dedicados netamente a esta actividad, estamos conscientes de las dificultades que están atravesando y se ha estado trabajando con ellos para reinventar su actividad, para que puedan sobrevivir a través de la adaptación a esta nueva realidad. Porque no se trata únicamente de esperar a que la pandemia pase, sino que nos tocará aprender, a todos, a adaptarnos al nuevo turismo. Y a algunos les cuesta más que a otros.
En el caso de las escalinatas Diego Noboa en el cerro Santa Ana y el barrio Las Peñas, desde antes de la pandemia se ha trabajado en la zona gracias a un proyecto de rescate a la comunidad, realizado por la M. I. Municipalidad de Guayaquil y liderado por la concejala Nelly Pullas, la zona ha recibido la atención y el apoyo de los diferentes estamentos que conforman la M. I. Municipalidad de Guayaquil.
Ha promovido el trabajo conjunto y articulado, necesario en el nuevo turismo, conformando un grupo con los 26 bares del cerro, junto con la Policía Turística, el programa Ecuador Por Mis Lentes, la Escuela Culinaria de las Américas, la Dirección de Justicia y Vigilancia municipal, y varios guías turísticos.
Se les propuso un programa de capacitación en diferentes temáticas, como Marketing Digital, manejo de herramientas administrativas, gastronomía, entre otros, iniciando con el curso de Marketing Digital, dado que este nuevo turismo se promociona y vende a través de las redes sociales. Sin embargo, solo participaron representantes de siete establecimientos.
Durante el inicio de la pandemia se mantuvo cerrado el Faro, por lo que los bares de la localidad solicitaron que se reabra para poder reactivar la zona. La Municipalidad les propuso a su vez que se conviertan en restobar, una nueva modalidad de establecimiento que permitiría la reapertura de sus establecimientos, iniciándose así en el cerro el piloto de la ciudad para la conversión de bares y discotecas en restobares, como una opción para su reactivación.
Para el efecto, se brindó una capacitación integral sobre los protocolos de bioseguridad, con la Dirección de Riesgos, y sobre la calidad del servicio. Al momento existen 22 restobares, que pudieron reabrir sus establecimientos luego de participar en estas capacitaciones.
Sin embargo, debemos recordar que, históricamente, el mes de marzo pertenece a la estacionalidad baja de la actividad turística en la zona urbana de Guayaquil, precisamente por las precipitaciones pluviales y el sol incandescente durante el día. Muchos empresarios en otras zonas de la urbe diversifican su oferta y la fortalecen con servicios culturales para fidelizar a sus clientes, y hoy en día utilizan las redes sociales para promocionarse de manera permanente.
¿Si habla en cifras, se ha podido calcular las pérdidas que ha habido a un año prácticamente en el sector turístico en la ciudad, cuál es el valor?
Cifras exactas son difíciles de calcular porque la actividad turística produce una derrama económica más allá de los valores que facturan hoteles, restaurantes y agencias de viaje.
Esta actividad beneficia a todos, al tendero, al vendedor de botellas de agua, al taxista, al cuidador de carros, al campesino, al pescador, a la sucursal del banco, al cantante, a la orquesta y así, a toda una cadena de valor que provee al sector turístico.
Pero hablando únicamente de aquellas empresas que facturan por actividades turísticas, se ha calculado que la pérdida a nivel nacional durante el año ha alcanzado los 2.200 millones de dólares, cifra proporcionada por la Federación Nacional de Cámaras de Turismo del Ecuador.
Y aunque no existen cifras a nivel cantonal, el catastro turístico de la ciudad de Guayaquil representa al 13,50% del catastro turístico nacional, lo que permite suponer que las pérdidas son enormes.
Calculando únicamente el segmento MICE, de congresos y convenciones en la ciudad de Guayaquil, con base en el promedio de congresos internacionales que se dejaron de realizar por la pandemia, habiendo estado planificados para el año 2020, suma una pérdida mayor a 250 millones de dólares, de impacto económico directo e indirecto.
¿De qué manera ayudarlos?
Con el objetivo de alcanzar la reactivación turística de la ciudad de Guayaquil, se conformó junto con los integrantes de la cadena de valor de la industria de turismo el Comité Juntos por la Reactivación Turística del Gran Guayaquil, a fin de conocer las inquietudes y planteamientos del sector y juntos sacar adelante el turismo de la Perla del Pacífico. Actualmente este comité forma parte importante en la mesa técnica del COE cantonal, tomando así decisiones en favor de la actividad, pero sin comprometer el manejo de la pandemia, gracias a lo cual no se ha repetido la realidad que vivimos en el primer mes de esta emergencia.
Nuestro arduo trabajo a través de estrategias concretas y prácticas logró mantener a Guayaquil como el destino seguro y confiable que siempre fue, por tal motivo la Muy Ilustre Municipalidad de Guayaquil, a través de la Empresa Pública Municipal de Turismo, Promoción Cívica y Relaciones Internacionales recibió el sello “Safe Travels”, certificación que fue entregada por la ministra de Turismo, Rosi Prado.
La industria turística ha hecho varios planteamientos al Gobierno nacional, sobre todo en temas de créditos a largo plazo e incentivos, pero lamentablemente la industria turística siente que el Gobierno no los ha apoyado en función de la emergencia que vive el sector turístico, y por ello es parte también de la grave crisis económica que soporta la ciudad y el país.
En el caso nuestro, es decir, el Municipio de Guayaquil, que es la institución rectora de la ciudad de Guayaquil representado por la alcaldesa, Cynthia Viteri, sí ha tomado medidas importantes para la reactivación del sector productivo de la ciudad y del sector turístico; habiendo tomado las siguientes medidas en beneficio de la ciudad: suspensión de la tasa de turismo y la tasa de habilitación a partir del año 2021 y la tasa de pernoctación que pagan los turistas por alojamiento se suspendió desde el año 2020 a partir de la pandemia.
Por lo tanto, los dineros de estas tasas que suman más de 9 millones de dólares y que benefician en el caso de la tasa de habilitación al sector productivo, industria, comercio, construcción, etc., significan un valor de 9 millones de dólares que la alcaldesa de Guayaquil va a cubrir, considerando que esto es una inversión para la reactivación del turismo.
También se habla de inseguridad o que están en olvido estos espacios. Desde la Empresa de Turismo, ¿qué estrategias se han planteado o se están planteando para reactivar estos espacios?
Podemos asegurar que esa información no responde a la realidad.
Como parte de la estrategia para la reactivación turística de la zona, dentro del trabajo articulado entre funcionarios municipales, residentes locales y empresarios, se conformó el chat ‘Escalinatas del Cerro’ para el manejo de episodios de robos que se suscitaron en el cerro el año pasado. A través de este chat, del cual forman parte la Policía Nacional (Policía Turística), se alerta de la presencia de personas sospechosas en el chat, contando con la presencia inmediata de la policía turística o agentes metropolitanos, evitando así actos delictivos. Con esto hubo una reducción de 15 o 20 robos diarios a 0.
Y para un seguimiento más eficaz de la resolución de problemas relacionados con las facilidades y servicios municipales en la zona, en el mes de noviembre del 2020, se realizó una visita conjunta con diferentes Direcciones que conforman la Municipalidad: Obras Públicas, EMAPAG, Medio Ambiente, Siglo XXI, Urbaseo, Dirección de Mercados, creándose el chat interno ‘Asistencia a Cerros’, en el cual se genera la información sobre necesidades de arreglos o mejoras y se da seguimiento con la Dirección correspondiente, lo que ha permitido una respuesta a problemas relacionados a los servicios municipales que se puedan suscitar.
Adicionalmente, en la actualidad, todos los servidores municipales nos hemos convertido en veedores de la ciudad de Guayaquil, a través del programa NIA, que permite dar avisos georreferenciados de problemas o daños en la infraestructura de la ciudad. (I)