El pacto educativo global es una propuesta hecha por el papa Francisco —en el 2019— imperiosa, a raíz de la pandemia del COVID-19, porque la crisis es global y tiene varias aristas, una de ellas es educativa.

Se trata de poner al servicio de esta iniciativa todos nuestros esfuerzos, y como el Papa manifiesta, cualquier cambio requiere un itinerario educativo para construir nuevos paradigmas capaces de responder a los desafíos, las emergencias del mundo contemporáneo para comprender y encontrar soluciones a las exigencias de cada generación, y hacer florecer la humanidad de hoy y mañana. Todo esto con vista a formar personas maduras capaces de reconstruir el tejido relacional, crear una humanidad más fraterna, solidaria y sostenible. Llegado aquí, es válido el cuestionamiento: ¿qué esfuerzos estoy realizando para que se lleve a efecto este pacto educativo global? (O)

Cristhiam Armando Carpio Castro, magíster en Liderazgo Educacional, Daule