Parroquia rural de Guayaquil Juan Gómez Rendón, conocida como Progeso. Foto: Cortesía Municipio

Es crítica la situación económica y social de la parroquia rural del cantón Guayaquil, Juan Gómez Rendón conocida como Progreso, ubicada a 66 kilómetros de dicha ciudad, que su carretera principal es paso obligado de la ruta hacia los balnearios de Playas (provincia del Guayas) y Salinas (provincia de Santa Elena).

Nuestra parroquia tiene 400 comercios, entre formales e informales. Hay pocas fábricas e industrias. La tierra es fértil, pero solo la cultivan durante la lluvia en invierno, en el verano no, no hay agua a pesar de existir un canal de riego que está a 9 kilómetros y no hay canales secundarios. Los pobladores sobreviven trabajando en construcciones en Guayaquil y otros cantones. Pocos habitantes se han quedado para realizar comercio. Como el resto de la Costa, en nuestros pueblos hay que activar fuentes de trabajo y educación para mejorar la economía parroquial y desterrar la migración, pobreza, drogas, delincuencia, alcoholismo... Los moradores desean consejo y ayuda de las autoridades seccionales, nacionales; y del Ministerio de Obras Públicas que construya un paso deprimido vial en carretera a la altura del colegio fiscal Pablo Weber Cubillo, en dirección viniendo de Guayaquil y se conecte con la antigua carretera de salida a Guayaquil; solo así los vehículos ingresarán al centro de nuestra parroquia y el público consumirá papas rellenas, queso, café, bizcochos, maduros..., reactivarán el comercio inactivo. Deben capacitar en la atención al turista, danzas folclóricas y artesanías, volver a confeccionar con mimbre (canastas, portaplatos...), y tejidos (tapetes, manteles...); los turistas que van de paso a Playas y Salinas, verán arte musical, comprarán productos de la tierra (limones, naranjas, mandarinas, plátanos...). Levantarán nuestra actividad y autoestima. ¡Autoridades, piensen en las parroquias rurales! (O)

Francisco Marcos Anastacio Valarezo, profesor, Progreso