El 19 de agosto de 2019, la ‘Mesa de Negocios’ de Estados Unidos de América (Business Round Table), conformada por los CEO de las 181 principales corporaciones de ese país, redefinió el Propósito de las Corporaciones, declarando como principio que los negocios del siglo XXI se deben enfocar en generar valor de largo plazo para todos los participantes interesados en el objetivo de las empresas (stakeholders), con el fin de lograr la sostenibilidad de los negocios y de la sociedad y la prosperidad de los accionistas. La declaración de propósitos define un estándar moderno de “Responsabilidad Corporativa” cambiando el dogma empresarial de únicamente crear valor para los accionistas, vigente en los últimos 40 años. Los CEO creen que el sistema de libre mercado es la mejor forma de generar buenos trabajos, una economía fuerte y sostenible, innovación, un ambiente saludable y oportunidades económicas para todos.

Por la importancia de esta declaración de propósitos para el futuro de las economías de libre empresa, la describimos a continuación.

“Los ciudadanos de Estados Unidos merecen una economía que permita a cada uno tener éxito a través de fuerte trabajo y creatividad, y llevar una vida de dignidad y autosatisfacción. Los negocios juegan un rol vital en la economía creando trabajo, apadrinando la innovación y proveyendo de bienes y servicios esenciales a la comunidad. Las empresas fabrican y venden productos, manufacturan equipos y vehículos, son soporte de la defensa nacional, cultivan y producen alimentos, proveen cuidados para la salud, generan y entregan energía, y ofrecen servicios financieros, de comunicación, y otros que impulsan el crecimiento económico. A medida que cada una de nuestras compañías sirvan su propio propósito corporativo, compartirán un compromiso fundamental con todos nuestros participantes: a) entregar valores a nuestros clientes continuando con la tradición de las compañías de USA de liderar la forma de cumplir o exceder las expectativas de los clientes; b) invertir en nuestros empleados, empezando por compensarlos con equidad, y proveerles importantes beneficios, incluyendo soporte con entrenamiento y educación que les ayude a desarrollar nuevas capacidades para enfrentar los rápidos cambios del mundo, apadrinando diversidad, dignidad y respeto; c) negociando con justicia y equidad con nuestros proveedores, dedicándonos a servir como buenos socios de otras compañías grandes y pequeñas que nos ayudan a cumplir nuestra misión; d) brindando soporte a las comunidades en las que llevamos a cabo nuestras actividades respetando a su gente, protegiendo el ambiente y acogiendo prácticas sustentables en nuestros negocios; e) generando valores a largo plazo para los accionistas, quienes proporcionan el capital que permite invertir en las empresas, crecer e innovar y mantenernos comprometidos con la transparencia; f) cada uno de los participantes son esenciales. Nos comprometemos a entregar valor a todos ellos por el futuro éxito de nuestras compañías, nuestra comunidad y nuestro país”.

Esta declaración de propósitos enfocados en el bien común, de convertirse en norma obligatoria, fortalecería la sustentabilidad del sistema económico de libre empresa como modelo para lograr el crecimiento económico y el bienestar común, en el actual mundo lleno de insatisfacciones reflejadas en los permanentes reclamos de inequitativa concentración de la riqueza en una población minoritaria de los países ricos y pobres.

Para que la obligatoriedad para las corporaciones funcione, estos propósitos deberían incorporarse en sus Normas de Gobierno Corporativo y la Securities and Exchange Commission, entidad que registra a las compañías emisoras y aprueba las emisiones, incluirlas como requisito en los reportes que presentan todos los años las compañías registradas para emitir y colocar sus acciones y bonos en el Mercado de Valores de ese país. La adopción de estas normas de Gobierno Corporativo podría también ser aprovechada por las Naciones Unidas para impulsar un pacto político social mundial que refleje una visión de Políticas de Estado con normas de comercio justo entre naciones, que dirijan el logro de la sostenibilidad del crecimiento y estabilidad política, económica y social en el largo plazo. (O)