En el patio de ceremonias de la Escuela Superior de Policía en Pusuquí, norte de Quito, se desarrolló este miércoles el relevo del mando institucional de esa entidad de seguridad.
A pesar de que mediante el Decreto Ejecutivo n.º 619, emitido por el presidente Daniel Noboa el 2 de mayo pasado, se designó como nuevo comandante general de la Policía al general Pablo Vinicio Dávila Maldonado, recién este día hubo un evento especial al que asistieron representantes de las instituciones del Estado.
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Dávila reemplazó en el cargo al general Víctor Hugo Zárate, luego de nueve meses en funciones.
Personal de la entidad con uniforme de gala de colores azul y negro se ubicó en el patio y hubo una pantalla gigante en la que se transmitió la ceremonia.
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Noboa llegó pasadas las 10:30 y fue recibido por el ministro del Interior, John Reimberg, y el mando policial. La ceremonia se inició con el himno nacional, después intervino Zárate, quien mencionó que estuvo 37 años en la institución dedicados a la seguridad ciudadana y formó parte del GIR.
Luego Zárate entregó formalmente los símbolos institucionales a Dávila, quien dijo que los llevará con honor, dignidad y respeto a la Constitución y las leyes.
También se dio la lectura del decreto ejecutivo con el que se otorgó el ascenso honorífico de general superior de la Policía a Dávila.
El comandante general destacó la labor del personal policial, anunció que fortalecerá las capacidades para combatir con firmeza el crimen organizado y se realizarán intervenciones en zonas donde haya violencia.
Además de que habrá nuevos modelos de intervención hiperfocalizada, reforzará las capacidades investigativas, recuperará el control territorial en sectores críticos y articulará el trabajo con otras entidades estatales, porque —adujo— la lucha contra el crimen es responsabilidad de todos.
Mencionó que cuidará y escuchará las necesidades del personal, pero la institución será implacable con aquellos vinculados a la corrupción.
Reimberg resaltó la trayectoria de Dávila, quien es oriundo de la provincia de Imbabura, con 54 años de edad y más de 35 años de servicio. Se desempeñó como comandante de la Zona 8, que incluye Guayaquil, Durán y Samborondón.
A Dávila le dijo que el Gobierno le extiende su respaldo para continuar fortaleciendo la institución, combatir las estructuras criminales y garantizar una Policía más profesional.
Noboa se refirió a los operativos de las fuerzas de seguridad contra el terrorismo que han permitido capturar a sus miembros y decomisar casi 100 toneladas de droga.
Dio la bienvenida a Dávila y expresó que se renueva la esperanza de alcanzar la victoria en la lucha diaria.
Indicó que el liderazgo y profesionalismo inspirará a los policías para que sirvan con honor y patriotismo.
Anunció que seguirán fortaleciendo las capacidades de las fuerzas de seguridad para combatir el terrorismo y así lo será hasta derrotar a quienes amenazan la democracia y el futuro.
El ingreso de Dávila a la Comandancia General supuso también un cambio en el mando institucional con el general Fausto Íñiguez como subcomandante general; el general Víctor Herrera, inspector general; el general Henry Tapia, director general de Seguridad Ciudadana; el general William Villarroel, director general de Investigación; y el general Jorge Cevallos, director de Educación. (I)