CUENCA

Aunque hasta el momento la situación en los alrededores y en el interior del Centro de Privación de Libertad de Turi se mantiene aparentemente calmada, la crisis generada en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, por el asesinato de 116 reos, alerta a las autoridades de Cuenca. Por ello, desde la tarde del miércoles pasado se mantienen constantes reuniones para analizar el tema carcelario.

Uno de los que más ha mostrado preocupación es el alcalde de Cuenca, Pedro Palacios, quien espera que este estado de excepción, declarado el miércoles pasado por el presidente Guillermo Lasso, “no sea un pretexto para que nuevamente se trasladen personas privadas de la libertad (PPL) al Centro de Rehabilitación Social de Turi”, dijo.

Publicidad

Su principal preocupación apunta hacia los problemas de inseguridad que se podrían generar en los alrededores del centro y en toda la ciudad.

En la Mesa de Seguridad realizada la tarde del miércoles 29, Palacios comentó que los jefes policiales les expusieron un cuadro en el que, según ellos, las cifras de actos delictivos están a la baja en Cuenca. También acordaron realizar un nuevo encuentro para hablar exclusivamente de los temas vinculados a la cárcel de Turi, con el compromiso de apoyarse y ofrecer apoyo mutuo.

Palacios cuestionó a las autoridades sobre los procesos de rehabilitación que están haciendo con los reos que se mantienen en la cárcel de Turi y otros asuntos legales. “¿Cuáles son los mecanismos jurídicos que permitan agilidad en el tema de sentencias? ¿Cuántas personas están ahí sin siquiera todavía tener una sentencia? Esto es estructural, y ojalá y espero de corazón que lo estén viendo de esa manera”, señaló.

Publicidad

Sobre el tema, el gobernador del Azuay, Matías Abad, aún no se ha pronunciado. Únicamente a través de su cuenta de Twitter publicó un video en donde mencionó que en el Comité Provincial de Seguridad se reunió con la presencia de varias autoridades para abordar temas inherentes a esta problemática.

El pasado 20 de septiembre, 34 personas privadas de la libertad fueron derivadas desde Ibarra hasta Cuenca. La cárcel de Turi tiene una capacidad para 2.716 presos, y en la actualidad acoge a más de 2.600. (I)