La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y la Unión de Organizaciones Indígenas y Campesinas de Cotacachi (Unorcac) informaron de la muerte —de acuerdo con sus informes— de un cuarto manifestante que participó en las protestas en la Sierra norte en rechazo al incremento del precio del diésel de septiembre y octubre pasado.

Se trata de Édison Farinango Tontaquimba, artesano, agricultor y constructor, que falleció dos meses después de las protestas por “graves heridas, producto del uso desproporcionado de la fuerza contra las comunidades movilizadas”, detalla una nota de condolencia publicada por la Conaie en sus redes sociales, bajo el título “Los crímenes de Estado no tienen retorno ni perdón”.

Farinango era oriundo de la comunidad de San Ignacio de Cotacachi y su muerte se produjo este sábado, 27 de diciembre, en horas de la tarde.

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El 18 de septiembre de 2025, la Conaie llamó a sus bases a un paro nacional de actividades en rechazo a la política económica del presidente de la República, Daniel Noboa, que eliminó el subsidio al diésel y subió su precio de $ 1,80 a $ 2,80.

Las manifestaciones se desarrollaron en varias provincias, pero con intensidad en Imbabura, que permaneció bloqueada por comunidades indígenas kichwas por 30 días.

En respuesta, el Gobierno nacional movilizó efectivos de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas para despejar las carreteras y permitir la movilidad ciudadana.

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El 22 de octubre pasado, el presidente del movimiento, Marlon Vargas Santi, anunció que las medidas de hecho terminaron y pidió a los comuneros que se replieguen a sus territorios ante las alertas de que se preparaba una posible intervención de las fuerzas de seguridad.

Según los reportes de la Conaie y de la Unorcac, son cuatro personas las que fallecieron en el contexto del paro: Efraín Fuerez, José Guamán, Rosa Paqui y Édison Farinango. (I)