El vicepresidente Alfredo Borrero se pronunció luego que el presidente de la República, Guillermo Lasso, disolvió la Asamblea Nacional, este miércoles 17 de mayo, acogiéndose al artículo 148 de la Constitución y argumentando la causal de grave crisis política y conmoción interna y dijo que esta decisión se tomó escuchando a los ciudadanos.

“El presidente y yo estamos convencidos de que el pueblo ecuatoriano es quien tiene el poder real. Somos demócratas, respetamos la Constitución y escuchamos a los ciudadanos. Estamos en Gabinete definiendo nuevas acciones inmediatas en beneficio de los ciudadanos”, indicó el segundo mandatario en su cuenta de Twitter.

En la transmisión en vivo en la que Lasso anunció la medida no apareció Borrero y solo figuraron algunos de sus principales ministros, lo que causó cuestionamientos sobre el estado de su relación con el vicepresidente.

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Durante el tiempo que lleva en el cargo, la poca aparición de Borrero ha sido uno los mayores cuestionamientos de parte de diferentes actores. No obstante, diferentes analistas aseguran que el vicepresidente se ha limitado a cumplir las tareas asignadas por el presidente Lasso.

El 24 de mayo de 2021, Lasso, mediante decreto ejecutivo, encargó a Borrero la coordinación de las políticas públicas necesarias para el fortalecimiento del Sistema Nacional de Salud en conjunto con el Ministerio de Salud Pública y la Secretaría Nacional de Planificación.

Borrero era pieza clave en caso de que se hubiera concretado la destitución de Lasso mediante el juicio político que se estaba desarrollando en la ahora disuelta Asamblea Nacional, por el presunto delito de peculado.

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En ese escenario, el vicepresidente debía asumir el cargo por lo que restaba de mandato, lo que no era algo nuevo en la historia política del país. (I)