El presidente Daniel Noboa ratificó que su Gobierno no continuará con el proyecto minero Loma Larga, que la empresa canadiense Dundee Precious Metals busca implementar en los páramos de Quimsacocha, en Azuay, y sostuvo que en esta provincia ya no deberían protestar por esta causa.

En entrevista con Ecuavisa, este viernes, 26 de septiembre de 2025, el mandatario repasó que este proyecto minero empezó en la época del correísmo —del expresidente Rafael Correa— y que después siguió avanzando. En la época del expresidente Guillermo Lasso, agregó Noboa, hubo una sentencia de la Corte Constitucional y que después a su Gobierno le tocó acatar dicha sentencia.

“Estamos obligados. Hay que hacerle caso también a los fallos judiciales. Cuando se le hace caso a los fallos empieza todo este problema social y protestas”, sostuvo el jefe de Estado.

Publicidad

Noboa repasó que tras tomar la decisión de suspender el proyecto minero, el Ejecutivo ordenó al alcalde de Cuenca, Cristian Zamora, y al prefecto del Azuay, Juan Cristóbal Lloret, que emitan los informes sobre posibles afectaciones a las fuentes hídricas y, basados en esos informes, dijo el presidente “tendrán que responsabilizarse las autoridades locales”.

“No va más lo de Loma Larga y es hasta absurdo porque siguen protestando por Quimsacocha. Hermanito, eso no va, pero son las ganas de seguir calentando las calles y seguir diciendo que no escuchamos a la gente”, enfatizó Daniel Noboa, bajo el contexto del paro nacional de la Conaie.

El mandatario señaló que las personas que se oponen a este proyecto seguirán manifestándose siempre por alguna razón, pero consideró que “los de Quimsacocha ya no deberían estar protestando”.

Publicidad

Sobre este conflicto minero, el pasado 25 de septiembre, la Presidencia de la República anunció que, con base en los informes presentados por la Prefectura del Azuay y el Municipio de Cuenca, el Gobierno iniciará el proceso correspondiente para la suspensión de la licencia ambiental del proyecto Loma Larga, a cargo de la empresa Dundee.

“Al mismo tiempo, las autoridades locales deberán responder por la veracidad, consistencia y responsabilidad técnica de los informes que han puesto en consideración del Gobierno central”, informó el Ejecutivo.

Publicidad

En Azuay, comunidades indígenas, defensores del medioambiente, ecologistas y organizaciones sociales se opusieron al proyecto minero Loma Larga, tras alertar de la contaminación que podría generar a las fuentes de agua. Bajo esta consigna, el 16 de septiembre, cerca de 100.000 ciudadanos se movilizaron en Cuenca, para exigir la revocatoria de la licencia ambiental a la minera canadiense. (I)

Publicidad