El general Fausto Salinas, comandante de la Policía, señaló este miércoles, 30 de agosto, que conociendo la situación de riesgo del coronel José Luis Erazo tomó dos acciones: trasladarlo a una ciudad de la Sierra y asignarle protección de seis policías a la fecha.

El teniente Rodney Rengel también fue trasladado a una localidad de la Sierra, añadió Salinas.

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Los abogados de ambos funcionarios policiales presentaron un pedido de medida cautelar urgente a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que se obligue al Estado ecuatoriano a tomar medidas de protección para ellos y sus familias.

Ambos denunciaron este miércoles haber sido víctimas de amenazas por su participación en la investigación del caso denominado León de Troya.

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En un informe elaborado por la Unidad de Antinarcóticos de la Policía Nacional sobre el caso se señalaron supuestos nexos entre la mafia albanesa y el empresario Rubén Cherres (asesinado), quien era amigo de Danilo Carrera, cuñado del presidente Guillermo Lasso. La investigación fue archivada.

Pero a raíz de aquello, los abogados de Erazo y Rengel han señalado que los policías han sido “perseguidos y hostigados por el Estado”.

Fausto Salinas, comandante general de la Policía, sostuvo esta tarde, tras una rueda de prensa en el Cuartel Modelo, en Guayaquil, que aquello no es así. Rechazó las declaraciones de los defensores de los oficiales.

Sobre el coronel Erazo, Salinas refirió que él está cumpliendo las funciones que le competen como servidor policial activo.

“Adicionalmente se le da todo el resguardo que necesita y se va a incrementar en medida del análisis de riesgo que se lo manifieste. Nosotros como institución rechazamos esas declaraciones que hablan de que hay una persecución, la Policía no persigue a nadie, simplemente si alguien comete una falta será sancionado”, aseveró el jefe de los uniformados. (I)