Jorge Glas Espinel consiguió salir de la cárcel 4 de Quito en noviembre del 2022, pero su libertad condicional expone a Wilman Terán a enfrentar un cuarto proceso de investigación por presunta asociación ilícita, ya que habría sido él quien redactó el fallo en un habeas corpus que benefició al exvicepresidente de la República en esa fecha.
Fruto del caso Metástasis nace el caso Vidrio Libre, en el que la Fiscalía General del Estado abrió otra investigación por presunta asociación ilícita en el que son sospechosas cinco personas: Wilman Terán, expresidente del Consejo de la Judicatura (CJ), la exjueza de Santo Domingo de los Tsáchilas Anabel del Jesús T. C., dos abogados en libre ejercicio y un exfiscal de Santo Domingo de los Tsáchilas.
El proceso lo manejó con reserva la Fiscalía, hasta que este 5 de junio de 2025, el conjuez de la Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), Rodrigo Sarango, llamó a una audiencia de formulación de cargos en contra de las cinco personas.
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A la Corte asistió el fiscal general (s), Wilson Toainga, y Wilman Terán, pero se suspendió porque no asistieron los abogados defensores de los demás procesados. Según el conjuez, hubo una falla electrónica que impidió que las notificaciones por correo electrónico lleguen a sus destinatarios y ello podría afectar el derecho a la defensa.
El expediente sobre este posible delito se originó del testimonio anticipado de Álex Palacios, exasesor de Terán, cuando este último era juez de Corte Nacional, entre mayo y agosto de 2023, y también fue coordinador jurídico en la Judicatura, cuando fue presidente.
Su testimonio lo rindió en el caso Independencia Judicial, en el que se procesó a los exvocales Maribel Barreno y Xavier Muñoz por obstrucción a la justicia.
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Palacios narró a la Fiscalía que el 26 de noviembre de 2022, Wilman Terán, conocido con el alias Diablo, según reveló el caso Metástasis, le pidió que fuera a su domicilio y desde ahí emprendieron un viaje a Santo Domingo de los Tsáchilas.
Terán llevaba su computadora portátil y un pendrive y cuando llegaron al punto, le pidió que se estacionara junto a un vehículo azul que le habría pertenecido a la abogada Anabel T. C. Justamente, los dos exfuncionarios judiciales son procesados también en el denominado caso Pantalla.
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“Cuando nos bajamos de ahí, pudieron hacer la entrega de la medida cautelar a favor de Jorge Glas Espinel, que iba a ser firmada por Cristian Palacios y a la vez iba a ser tramitada por Anabel T., para que el juez Émerson Curipallo falle a favor de Jorge Glas en esta medida cautelar (habeas corpus). La medida cautelar (el fallo) fue elaborado por Wilman Terán Carrillo en su computadora y le entregó un pendrive”, relató el exfuncionario judicial.
Fue así como el 28 de noviembre de 2022 Jorge Glas dejó la cárcel 4, ubicada en Cotocollao, en el norte de Quito, donde cumplía una sentencia por cohecho agravado en el caso Sobornos 2012-2016.
El fallo lo suscribió el exjuez de la Unidad Judicial Penal de Santo Domingo Émerson Curipallo, sentenciado por delincuencia organizada dentro de Metástasis.
Curipallo aceptó la petición de medidas cautelares solicitadas por Glas, al considerar que existía “una inminente amenaza de vulneración a los derechos a la seguridad jurídica y al debido proceso”, enfocando su análisis en la unificación de penas y acceso a beneficios penitenciarios. Por lo que ordenó su libertad y medidas alternativas a la privación de libertad.
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En enero de 2024, el juez subrogante de la Unidad Judicial, José Alvarado, revocó la medida cautelar a favor del exvicepresidente y uno de los líderes del movimiento Revolución Ciudadana (RC), que lo preside el exmandatario Rafael Correa.
Se alegó que incumplió la orden de presentación una vez por semana en la cárcel.
Durante varios meses permaneció bajo la medida cautelar de libertad provisional, hasta que la Fiscalía se preparara a formularle cargos por el caso Reconstrucción de Manabí.
Entonces, a finales de 2023, y con las revelaciones del caso Metástasis, Jorge Glas se refugió en la Embajada de México en Quito, hasta que el 5 de abril de 2024, el gobierno de Daniel Noboa ordenó el ingreso de la Policía Nacional a la sede diplomática y lo recapturó.
Desde entonces, permanece recluido en la cárcel de La Roca, en Guayaquil.
Con Metástasis se destapó la ‘desnaturalización’ que se hacía en la justicia ordinaria de las medidas jurisdiccionales, como el habeas corpus.
Esto se constató al ingresar a los teléfonos celulares del narcotraficante Leandro Norero (+), este era el cabecilla de una estructura criminal de la que eran parte policías, abogados, fiscales, jueces y Wilman Terán.
El exjuez Curipallo, a través de sus fallos, dejó en libertad a John Steven N. Q., alias Cuyuyuy, y a Santiago Leonel M. G., alias Madrid, quienes eran los brazos armados de Norero y son considerados jefes del grupo criminal, Los Lobos.
Los jueces de la Corte Constitucional (CC) escogieron varias sentencias de estos fallos jurisdiccionales, como el de Curipallo a favor de Glas.
En su sentencia declararon que Emerson Curipallo incurrió en dolo al aceptar la medida cautelar. Además, fue sentenciado por prevaricato y por delincuencia organizada. (I)
