La Asamblea Nacional cierra en esta semana cuatro años de su periodo legislativo que se inició el 14 de mayo de 2017. Un periodo marcado por los escándalos de corrupción, inestabilidad, fraccionamientos de bloques, destituciones de asambleístas, crisis políticay sanitaria, hechos que contribuyeron a una baja popularidad.

En materia legislativa tramitó y aprobó 74 proyectos de Ley, de los cuales 38 reforman leyes vigentes y 36 son nuevas. Y trató 13 juicios políticos en el pleno.

En este periodo que termina hubo tres presidentes de la Asamblea. El primero fue José Serrano, del movimiento Alianza PAIS (AP), que fue destituido el 9 de marzo de 2018, tras la filtración de un audio en que aparentemente negociaba con el excontralor Carlos Pólit, procesado en el caso Odebrecht. Este caso se investiga en la Fiscalía General del Estado.

Serrano fue reemplazado por Elizabeth Cabezas (AP), en cuyo mandato saltaron quince denuncias contra asambleístas sobre cobro de diezmos a los asesores legislativos y gestión de cargos públicos. Tras el escándalo e investigaciones se destituyó a Norma Vallejo (AP) y Ana Galarza (CREO). Queda pendiente la solicitud de investigación a Karina Arteaga (ex-AP), y en los demás casos no formalizaron las denuncias, pero la Fiscalía indaga.

Cabezas enfrentó una investigación en su contra al difundirse una conversación con la ministra del Interior de ese entonces, María Paula Romo, durante la votación de una solicitud de la bancada correísta de indagar al presidente de la República, Lenín Moreno, por el caso INApapers. No hubo votos para su destitución, pero el caso está en la Fiscalía.

César Litardo (AP) fue el tercer presidente de este periodo que está por cerrarse. Durante su mandado se presentó la crisis política de octubre del 2019, derivada de una ola de movilizaciones en rechazo a la eliminación del subsidio a los combustibles.

En ese periodo el país fue afectado por la pandemia del COVID-19, que obligó al Parlamento a replegarse e instalar las sesiones telemáticas. Pero eso no alejó a la Función Legislativa de los escándalos de corrupción: Daniel Mendoza (antes de AP) y Eliseo Azuero (BADI) fueron procesados por la Fiscalía por delincuencia organizada en el caso de la construcción del hospital de Pedernales, Manabí. Mendoza guarda prisión, mientras que Azuero está prófugo. En el proceso también fueron llamados a la Fiscalía ocho asambleístas que integraban la Bancada de Acción Democrática Independiente (BADI).

En medio de la emergencia sanitaria, brotaron dos escándalos de corrupción; uno derivado por una supuesta emisión fraudulenta de carnés de discapacidad que habría beneficiado a varios asambleístas, pero tras la investigación se determinó que el legislador Fabricio Villamar (IND) se habría beneficiado de exoneraciones tributarias al adquirir un vehículo usando el carné de discapacidad con inconsistencias. Se recomendó su destitución y el caso está también en la Fiscalía.

El otro escándalo se trató de un supuesto reparto de hospitales como cuotas políticas a los asambleístas. A nivel legislativo no se formalizó ninguna denuncia, pero el caso se ventila en la Fiscalía.

Asamblea termina con 10,7% de aprobación

Todos estos hechos registrados durante los cuatro años de la Asamblea, según el director de Cedatos/Gallup, Ángel Polibio Córdova, contribuyeron a un declive de la popularidad de la legislatura. Un informe de opinión del 21 de abril que consultó a 1.930 hogares revela que el actual periodo legislativo que se inició en mayo del 2017 empezó con una aprobación del 43%, pero dos años más tarde bajó la aceptación al 22% con tendencia a la baja; es así como en la administración de César Litado durante la pandemia en mayo del 2020 se ubicó al 9,4% hasta llegar al 6,1% en junio del mismo año.

Desde ese mes la legislatura empezó una fase de recuperación de su credibilidad hasta llegar en abril de este año, con la que concluye la actual Asamblea, de un 10,7%.

Las cifras sobre la aceptación de los parlamentos ecuatorianos varían, explica Polibio Córdova. Por ejemplo, en el año 2000 la credibilidad bajó a un 9% cuando dos años antes se ubicó en un 31%. Luego en el año 2002 bajó al 7%, pero también tuvo algunos avances en cuanto a la aprobación, pues en diciembre del 2006 subió a un 36%, pero un año más tarde sufrió un bajón y se ubicó en un 23%. En el gobierno de Rafael Correa con la Constituyente tuvo una aprobación del 43%, pero la gestión terminó en el 21%.

Otra variable que analizó Cedatos es la credibilidad de los asambleístas que en la mayor parte del tiempo siempre ha estado a la baja, en el 2001 se ubicó en el 3%, y el pico más alto se detectó en diciembre del 2007 con un 39%.

El actual periodo empezó con una credibilidad del 29% en mayo del 2017, y cada año bajó 9 puntos y la calificación más baja en toda la historia de la legislatura se detectó en junio del 2020 con el 2,4%; pero en abril del 2021 termina con un 7,6%.

Litardo admite que los dos años de su mandato no fueron fáciles, pero dice que ha cumplido y que pese a las dificultades políticas del país con problemas de corrupción y una crisis sanitaria nacional terminará un periodo legislativo.

Que ante los hechos de corrupción brindó facilidades para que las autoridades hagan su investigación, se procesó internamente a los legisladores denunciados, aunque considera que hubo una sobremediatización de los casos como el de los carnés de discapacidad donde tras una investigación se determinó que cuatro legisladores tenían el carné, de los cuales tres justificaron y que sobre uno hay dudas y está siendo procesado en la justicia; mientras que existen otras instituciones públicas donde hay incidencia mucho más alta de carnés de discapacidad con serias dudas.

Juan Lloret, del sector de la Revolución Ciudadana, considera que concluye una Asamblea que fue muy funcional al gobierno de Moreno, y a su criterio el actual periodo no termina bien en cuanto a la calificación de la opinión pública, no solo por la corrupción en el caso de los diezmos que manchó a algunos asambleístas, sino también por el tema del reparto de hospitales como cuotas políticas y la emisión de carnés de discapacidad fraudulentos; lo cual deja un Parlamento cuestionable y un sinsabor en la ciudadanía. Todos esos procesos están judicializados.

Lo que le faltó a la Asamblea es voluntad política para actuar frente a los escándalos de corrupción, pues a criterio de Lloret, hubo un falso espíritu de cuerpo en el ámbito legislativo porque no solo fue el reparto de hospitales, sino comisiones y espacios en el Ejecutivo como coordinaciones zonales de salud y educación en las provincias donde los asambleístas fueron los protagonistas, y eso contribuyó a una baja aceptación de la legislatura y del Ejecutivo, este último terminó su mandato con un 5% de aceptación.

Una de las fortalezas del actual periodo es haber sido defensor de la democracia y de la estabilidad económica porque ha dado instrumentos jurídicos que han permitido que el Ecuador esté en relación con el mundo, señala el coordinador de la bancada de CREO, Luis Pachala.

La aprobación de leyes como la de Ordenamiento de las Finanzas Públicas, de Simplificación Tributaria y la de Defensa de la Dolarización evitó, según Pachala, que el país entre a una quiebra económica, pues hace cuatro años había un país con saldo rojo en el tema presupuestario, deuda externa, con un déficit fiscal de $ 9.000 millones y con un gasto permanente de $ 25.000 millones.

El representante de CREO afirma que la Asamblea a pesar de las crisis cumplió con su rol democrático, de estabilización económica, política e institucional. El nuevo Parlamento debe actuar con suma transparencia teniendo en cuenta que son sagrados el servicio público y el manejo de los fondos públicos. Todos a trabajar con manos limpias. (I)

Leyes tramitadas en actual periodo legislativo

Periodo José Serrano 14/05/2017 - 09/03/2018

Periodo Elizabeth Cabezas 14/03/2018 - 13/05/2019

Periodo César Litardo 14/05/2019 - 13/05/2021