Con las manos en la masa o mejor dicho con los billetes en la boca aseguran, en Colombia, detuvieron a un policía que viéndose “descubierto” en la comisión de un presunto delito de extorsión decidió “tragarse” el papel moneda.

No hay tema de conversación o broma que en el vecino país no gire en torno de este insólito caso registrado en Soacha, a mediados de esta semana.

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La historia fue puesta en conocimiento del Gaula (Grupos de Acción Unificada por la Libertad Personal) y de la Fiscalía, pues al servidor policial y a un compañero de la institución los denunciaron por extorsión.

Ahora, los detenidos enfrentan un proceso judicial y los medios adelantan que la pena por lo hecho sería de 30 años de cárcel.

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¿Qué pasó en Soacha con el policía?

Una mujer, esposa de un comerciante que “era extorsionado”, contó que su pareja canceló un millón de pesos (240 dólares) de los dos que fueron solicitados por los agentes, reseñó Infobae.

Los uniformados llegaran a un local a solicitar dinero al comerciante a cambio de no llevarse detenido a uno de los integrantes de la familia por un supuesto proceso judicial, publicó Noticias Caracol.

Mientras se “acordaba” cómo cobrarían el dinero, los dos uniformados “retuvieron varias horas al ciudadano” hasta “pactar” supuestos pagos semanales.

Con las autoridades se planificó proceder a una entrega controlada de dinero. La denuncia, dijo Infobae, la tomó el Gaula.

Acatando la recomendación, el comerciante contactó a los agentes y les dijo que pasaran por su negocio. Allí, esperaban, iban a recibir los pesos semanales acordados.

Sin embargo, para su sorpresa, cuando cobraban irrumpieron uniformados y los policías quedaron “sorprendidos en flagrancia recibiendo el dinero”.

En El Colombiano agregaron que a los policías los atraparon porque “en medio del procedimiento de captura uno de los uniformados resolvió tragarse los billetes para evitar ser descubiertos”.

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Por poco se asfixia

-No tengo nada, no he recibido nada. No sé de qué me están hablando.

Así respondió uno de los agentes, el que señalan de haberse engullido “un billete de 100.000 pesos y ocho de 50.000 pesos (total 500.000 pesos)”

De nada le valió pretender desligarse del caso. En pocos segundos cambió de colores y comenzó a ahogarse. Estaba “atragantado”.

Presentó malestar estomacal y dificultades para respirar, describió El Colombiano, al tiempo que informó que el policía recibió atención médica. Los del Gaula le advirtieron allí mismo que debían ir a que le realizaran un lavado estomacal.

Qué dicen Fiscalía y en redes

La insólita historia tiene ahora a los policías frente a la Justicia. La Fiscalía de Cundinamarca indicó que les imputaron los delitos de secuestro extorsivo –por retener al comerciante previo al cobro de la extorsión. y extorsión agravada.

En el caso del que “se tragó los billetes” la prensa indicó que le sumaron el cargo de destrucción de la evidencia.

Los investigados pueden enfrentar una pena de hasta 30 años de prisión.

El hecho llamó la atención en redes, donde usuarios expresaron:

“Ver las noticias de Colombia es mucho más interesante que ver una serie de corrupción en Netflix. Increíble, somos únicos”, dijo con ironía Eri Torres.

“Le hacen un gran daño a la confianza de la Policía de Colombia”, expresó Néstor Maya. Y Paula Ariza lamentó el hecho y opinó: “Qué vergüenza para sus hijos, sus familias”.

(I)

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