Lo que debió ser una tarde de disfrute para un niño, se convirtió en un día trágico para una familia en Coolidge, Georgia, Estados Unidos. El pequeño estaba jugando a las escondidas y falleció tras quedar atorado entre una lavadora y una secadora.
El suceso ocurrió mientras visitaba a sus abuelos. El niño, Wrangler Hendrix de 8 años, estaba alegre por visitar a sus primos, y jugaba por toda la casa, hasta que, en cuestión de minutos, todo pasó a ser una pesadilla, según escribió El Heraldo de México.
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Niño muere al quedar atrapado entre la lavadora y la secadora
Luego de que iniciara el juego. El pequeño corrió a esconderse en una de las habitaciones de la vivienda ubicada en Murphy Road, en las afueras de Coolidge.
Al poco tiempo, sus familiares calculan 10 minutos después, los primos al ver que no conseguían al niño, alertaron a sus demás seres queridos. Todos comenzaron a buscar al infante, que había quedado atorado entre la lavadora y la secadora al intentar esconderse.
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Cuando la familia lo descubrió en medio de los electrodomésticos, inmediatamente uno de los adultos que allí se encontraba le dio primeros auxilios, mientras otro pidió una ambulancia.
Cuando llegó la unidad médica, el personal de salud le brindó también primeros auxilios y aunque el niño respondió por unos instantes, después perdió el conocimiento. Rápidamente fue trasladado al hospital local, pero cuando llegaron, el pequeño no tenía signos vitales y no se pudo hacer nada por salvarle la vida.
El niño, originario de Jewett, Texas, estaba tratando de esconderse detrás de los aparatos cuando quedó atrapado entre ellos y se presume que murió por asfixia posicional, puesto que no presenta ningún tipo de traumatismo, explicó el capitán de la oficina del alguacil del condado Thomas, Tim Watkins. (I)