Las historias son variadas, muchos migrantes deben superar travesías extenuantes para llegar a la frontera de Estados Unidos, de las cuales salir vivo es un logro.

Les roban los teléfonos, o los pierden al mojarse en los ríos que atraviesan. Otros conservan sus celulares, pero obsoletos o maltrechos.

Estados Unidos recordó que seguirá expulsando a los migrantes que intenten entrar sin usar “vías legales”, cuando esta medianoche pierda vigencia el llamado Título 42, una regla activada durante la pandemia para supuestamente frenar el covid-19, pero que en la práctica se utilizó casi 2,8 millones de veces para expulsar a migrantes al impedirles pedir asilo.

Publicidad

¿Qué pasará con los migrantes ecuatorianos con el retiro del Título 42 en Estados Unidos?

Todos deben usar app

La búsqueda de asilo en Estados Unidos dependerá en gran medida del uso de una aplicación a partir de este viernes. Pero la alternativa tecnológica parece desconectada de la dramática realidad en su frontera, donde teléfonos, wifi y electricidad son un lujo.

La aplicación CBP One, de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) fue diseñada para canalizar los pedidos de asilo a Estados Unidos, pero los migrantes agolpados en México lloran de frustración por las fallas de la herramienta evaluada por usuarios de la tienda Apple con 2,5 estrellas.

Todos los migrantes deberán usar la aplicación CBP One de la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU., para solicitar una cita y asilo en Estados Unidos. Foto: AFP

“Es algo insólito que una aplicación prácticamente decida nuestra vida y nuestro futuro”, dijo a AFP Jeremy de Pablos, un venezolano de 21 años que lleva semanas acampando en Ciudad Juárez.

Publicidad

De Pablos dijo que lo más difícil fue el reconocimiento facial: “Es un bingo, reconoce a quien quiere”.

“La aplicación en realidad es el muro, y no ese”, agregó señalando a la imponente pared que serpentea a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.

Publicidad

El gobierno de Joe Biden lanzó CBP One en enero ante el inminente final del Título 42, la norma sanitaria activada bajo la administración del expresidente Donald Trump para frenar la pandemia de covid-19.

El Título 42, que expirará la medianoche de este jueves, autorizaba la expulsión de quienes cruzaran la frontera sin visa o documentación necesaria para entrar, pero establecía excepciones.

Desde que se activó en 2020, casi tres millones de personas en busca de asilo fueron expulsadas, en su mayoría a México, donde se crearon campamentos improvisados.

Aumentaron expulsiones

Estados Unidos activará este viernes nuevas reglas para solicitar asilo que colocan a CBP One como el primer paso del proceso, so pena de deportación para quien pise suelo estadounidense sin tener una cita en la aplicación.

Publicidad

Las autoridades ampliaron los cupos diarios, así como las horas para registrarse en CBP One, pero sigue siendo una herramienta restrictiva.

Carlos Reyes acarició el sueño americano tras entregarse a agentes estadounidenses para pedir refugio. Pero cinco días después, en los que denuncia haber recibido trato de “asesino”, fue expulsado a México.

Venezolano de 32 años, Reyes y su amigo de la infancia Carlos Villafranca cruzaron el río Bravo desde la mexicana Ciudad Juárez, al igual que cientos de migrantes que buscan ponerse en manos de la patrulla fronteriza para luego pedir protección de Estados Unidos.

Todo parecía ir bien. Esperaron una semana del otro lado del río, la frontera natural, en una suerte de limbo entre una alambrada de púas que apunta hacia México y una alta y sofisticada reja que conduce a Estados Unidos.

Finalmente unos agentes los abordaron, y tras esposarlos, los condujeron a un albergue en El Paso, Texas. Villafranca asegura que estaba “contento”, pues creía que su petición de refugio sería escuchada. Sin embargo, tras cinco días preso, fue devuelto a territorio mexicano en Ciudad Juárez.

Un migrante muestra la aplicación CBP One de la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU., para pedir una cita para solicitar asilo, en un teléfono en Ciudad Juárez, estado de Chihuahua, México, el 10 de mayo de 2023. Foto: AFP

Antonio Sánchez Ventura llegó a Ciudad Juárez con su hermano huyendo de la violencia en su país y dice que en el camino le robaron todo. Vive en la calle y come de donaciones. Su único objetivo es reunir dinero para comprar un teléfono y descargar CBP One.

“Es el sueño americano de todo ser humano cruzar a Estados Unidos para ayudar a nuestros familiares”, dijo.

Los migrantes que aguardan en Ciudad Juárez viven en carpas, sin electricidad. Cargan sus teléfonos en los postes con marañas de cables.

Priorizan cada moneda que tienen para comprar saldo y tener internet. Pero ahí comienza la segunda parte del desafío.

“Mira, está pegado”, dice Ronald Huerta, un venezolano que este miércoles no conseguía avanzar de las configuraciones de idioma de la aplicación.

A pocos metros, Ana Paola, de 14 años, lloraba desconsolada porque la aplicación había sido actualizada y toda la información de ella y su familia había sido borrada.

“¡Estoy cansada! ¡No aguanto más!”, balbuceaba la adolescente mientras cliqueaba en “Enviar” de forma incesante para volver a crear los perfiles de la familia y recibía como invariable respuesta un mensaje de “Error 500″.

“Ha sido una gran pesadilla, ha sido un tormento. Esa aplicación nos ha causado un daño emocional, psicológico”, dijo a su lado su padre, Juan Pavón, un comerciante que huyó de Venezuela con su familia.

Tenían sólo un iPhone antiguo, con el cual su esposa intentó durante semanas pedir una cita para el grupo familiar en CBP One. Cuando recibió la confirmación de un horario, era apenas para ella.

La familia ahora está separada a ambos lados de la frontera.

Y a medida que se acerca el fin del Título 42, la ansiedad aumenta, con muchos perdiendo la paciencia y cruzando de forma ilegal hacia Estados Unidos.

“Esperé y esperé y esperé, pero me harté, no había forma de conseguir una cita”, dijo en El Paso, Texas, Luis Quintana, un venezolano que vivió en las calles de la vecina Ciudad Juárez por tres meses hasta que, frustrado, decidió cruzar a través de un hueco en el muro.

“Frustra que esta parte importante del proceso quede a merced de la tecnología que con frecuencia falla y que no es accesible a todos”, dijo Raúl Pinto, abogado senior del American Immigration Council.

Washington anunció esta semana que la aplicación evolucionará a un sistema virtual con mayor capacidad.

Un agente de la Patrulla Fronteriza observa cómo los niños y las familias migrantes recientes bajan de un autobús en un centro de procesamiento el 11 de mayo de 2023 en Brownsville, Texas. Foto: AFP

Directo a Washington

Mientras la frustración ocurre entre estos migrantes, al menos unos 17.000 migrantes han sido enviados a Washington, Chicago, Nueva York y Filadelfia, todas ellas ciudades gobernadas por los demócratas, como parte de la campaña republicana de presión migratoria que arrancó el año pasado.

Desde la Casa Blanca, el secretario de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), Alejandro Mayorkas, criticó este jueves la medida del gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, de mandar migrantes a otros estados.

Este mismo jueves, una treintena de migrantes, enviados por Texas, llegó a la residencia en Washington de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris.

Según medios locales, hombres, menores y mujeres -la mayoría de Venezuela- fueron recibidos por voluntarios de la organización SAMU First, que les ha proporcionado alojamiento temporal y orientación sobre los próximos pasos a seguir. (I)