El escándalo ha sido tal que el Consejo Nacional de Justicia de Brasil ha decidido tomar cartas en el asunto.

El órgano, que tiene entre sus funciones esclarecer denuncias relacionadas con el Poder Judicial, informó este jueves que investigará la conducta de una jueza que mantuvo en un albergue a una niña de 11 años -embarazada tras ser víctima de violación- para impedirle tener un aborto legal.

Un video publicado por Portal Catarinas y por The Intercept a inicios de esta semana puso el suceso en la palestra, aunque la audiencia tuvo lugar el pasado 9 de mayo.

Publicidad

En el video, se ve a la jueza Joana Ribeiro Zimmer, del Tribunal de Justicia de Santa Catarina (TJSC), tratar de convencer a la menor de que no tenga un aborto.

“En cuanto al bebito, ¿comprendiste que si haces una interrupción, nace el bebé y tenemos que esperar a que muera ese bebé? ¿Entendiste eso? ¿Que es cruel? Nace el bebé y llora hasta que muere”, le dice la jueza.

En otro momento, parece presionar a la niña para que espere hasta a dar a luz y dar al bebé en adopción.

Publicidad

“¿Cuál es la expectativa que tienes en relación al bebé? ¿Quieres verlo nacer?”, le pregunta otra vez la jueza.

Tras una respuesta negativa de la niña vuelve a preguntarle si le gustaría “elegir el nombre del bebé”.

Publicidad

Va más allá e incluso le pregunta si el violador estaría de acuerdo con una potencial adopción.

“¿Crees que el padre del bebé estaría de acuerdo en darlo en adopción?”, se le oye decir.

El video se volvió viral en Brasil y numerosas voces cuestionaron el proceder de la jueza, quien anunció que abandonaba el Juzgado de la Niñez donde trabajaba.

Ribeiro Zimmer fue ascendida y trasladada a otra ciudad, aunque afirmó que había sido nombrada antes de que saliera a la luz el caso y que decidió aceptar el nuevo cargo.

Publicidad

El caso

Según informó la prensa brasileña, la niña presuntamente sufrió abuso sexual a los 10 años por un miembro de su propio hogar.

Tras ser llevada a un hospital en la ciudad de Florianópolis, los médicos detectaron que tenía 22 semanas de embarazo, por lo que le negaron el procedimiento para abortar y afirmaron que solo se lo realizarían con una autorización judicial.

El Consejo de Tutela de la ciudad donde vivía cuando fue violada contactó entonces al Ministerio Público de Santa Catarina (MPSC) que, a su vez, presentó una solicitud para que la niña fuera llevada a un albergue temporal.

La jueza envió la niña a un albergue para evitar que abortara. SOLON SOARES/AGÊNCIA ALESC Foto: BBC Mundo

En la decisión, la jueza Ribeiro Zimmer dijo que la derivación al albergue, inicialmente hecha a pedido del Juzgado de la Infancia para proteger a la niña del agresor, ahora tenía como objetivo “prevenir el aborto”.

La magistrada precisó que la madre de la niña dijo en el juzgado que quería el bien de su hija, pero consideró que, si la joven no hubiera sido acogida en un albergue, habría tenido el procedimiento del aborto forzado por su madre.

La polémica

En el video de la audiencia se oye a la jueza en varias ocasiones presionar a la menor para que lleve el embarazo a término.

“¿Hasta cuándo aceptarías tener al bebé en tu vientre para que terminemos de formarlo, darle las medicinas para que madure su pulmoncito, para que podamos llevar a cabo esta extracción temprana del bebé para que alguien más se encargue, si quieres?”, le dice.

La jueza trata incluso de convencer a la madre de la niña: le comenta que si su hija da a luz, podría dar al recién nacido en adopción y generar alegría en “30.000 parejas que quieren el bebé”.

“Será una alegría para ellos porque no están pasando por lo que estoy pasando yo”, responde la madre de la niña de 11 años.

Getty Images Foto: Getty Images

En entrevista con el diario Diário Catarinense tras la divulgación del caso, la jueza dijo que no estaba en contra del aborto, sino que había tomado su decisión basada en un “concepto” de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud de Brasil.

“La palabra aborto tiene un concepto y este concepto es hasta las 22 semanas. Este concepto es de la OMS (Organización Mundial de la Salud) y el Ministerio de Salud. Existe un plazo”, dijo.

Sin embargo, el portal de BBC Brasil explica que en los tres casos en que la legislación brasileña permite el aborto (violación, riesgo de vida materna o malformación fetal incompatible con la vida), no hay límite de edad gestacional.

En la entrevista, la magistrada rebatió las críticas y dijo que no daba más detalles para no exponer a la niña.

“Por coherencia, prefiero que me acusen de todo para proteger a la niña. Es muy cobarde que yo quiera defenderme, tengo mil cosas para defenderme, pero es muy cobarde que yo intente defenderme y exponer a la niña, a la madre de la niña, a la familia. Así que prefiero soportar esta presión sola”, dijo.

La jueza indicó que tampoco daría más detalles porque, tras hacerse público el caso, había “riesgo para su vida” y continuar dando información podría generar gastos adicionales a la corte, como por ejemplo, al tener que proveerle guardaespaldas.

“Hay otro tema, que es la seguridad institucional, mis datos se hicieron públicos y mi vida ya está en riesgo. Entonces, hay una responsabilidad más de no generar un costo para la corte al tener que poner guardias de seguridad. Puedo andar hablando y la corte tiene que seguir pagando a los guardaespaldas”, dijo.

Ribeiro Zimmer trabajaba en el área de Infancia y Juventud desde 2004 y fue promovida a un tribunal comercial en el área del Valle de Itajaí. (I)