Actualmente hay muchas variantes del COVID-19 y algunas de ellas causan preocupación debido a su nivel de transmisibilidad y mortalidad. Las tres más complejas son la B.1.1.7 (Reino Unido), B.1.351 (Sudáfrica) y P.1. (Brasil). La británica y la brasileña están presentes en Ecuador.

Estas mutaciones han generado dudas en la ciudadanía sobre la eficacia de las vacunas desarrolladas por las diferentes farmacéuticas. Sin embargo, Alejandro Cané, jefe de Asuntos Científicos de la División de Vacunas de Pfizer, afirma que las vacunas actuales están respondiendo correctamente a estas variantes.

“La información que tenemos de la vida real en países como el Reino Unido e Israel, donde la variante británica circulaba de forma importante, es que se ha visto una reducción del 98% de los casos, hospitalizaciones y las muertes. Lo mismo ha pasado con la variante sudafricana. Todavía no hace falta cambiar la formulación de la vacuna”, dice.

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Aunque señala que, si es necesario, Pfizer cambiará la fórmula de su vacuna para adaptarla a otras variantes. Además, la molécula que ellos utilizan (ARN mensajero) es muy pequeña y fácil de modificar, y en pocos días se obtendría una nueva fórmula.

Pero actualmente Pfizer está estudiando aplicar una tercera dosis de su vacuna entre seis meses y un año después de las dos primeras inyecciones, para saber si de esa manera, aumentado el nivel de anticuerpos, “podemos estar seguros de que la vacuna trabaja bien contra nuevas variantes”, añade Cané.

Estos estudios están en marcha y terminarían a finales de este año: “Sin embargo, la vacuna actual, aplicada en dos dosis con tres semanas de intervalo, ha mostrado ser eficaz, y no solo en laboratorio, en neutralizar a las distintas variantes que están circulando”.

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En Ecuador, según cifras del Ministerio de Salud, las vacunas de Pfizer empezaron a llegar desde enero de este año y hasta junio arribarán 1’610.630 dosis. Junto con las de Sinovac son las que más se están inyectando en el país. Hasta el 19 de abril pasado, han sido inoculadas 401.871 personas con una dosis y 175.840 con la segunda dosis.

El ministro de Salud, Camilo Salinas, esta semana, aseguró que es probable que en poco tiempo la cepa brasileña sea comunitaria en el país. Además, mostró su preocupación por la variante sudafricana, que todavía no se ha detectado en el Ecuador.

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¿Por qué digo que me preocupa si es que esta variante (sudafricana) ingresa al Ecuador? Es porque esta variante reduce hasta el 10% y 15% la efectividad y seguridad de las vacunas...”, señaló.

De hecho, una investigación realizada en la Universidad de Tel Aviv, junto con el proveedor de atención médica israelí Clalit, reveló que la variante sudafricana resiste a la vacuna de Pfizer y Biontech en individuos con las dosis completas, pero sin especificar el grado de resistencia.

Los autores, sin embargo, sugieren la continuidad de la campaña de vacunación con esta inyección por la baja representación de casos de esta variante en Israel, lugar donde se desarrolló este estudio.

“Solo podemos especular con cautela sobre la efectividad de la vacuna contra las cepas sudafricana y británica de estas fechas. La campaña de vacunación a nivel mundial ha demostrado una efectividad muy alta de la inyección Pfizer y Biontech, comenzando una semana después de la segunda dosis”, concluyen los autores de la publicación.

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Aunque Cané es enfático en asegurar que la vacuna de Pfizer responde “bien” a esa cepa.

El presidente Lenín Moreno decretó, ayer, otro estado de excepción focalizado en 16 provincias para poder aplanar la actual curva de contagios. La ocupación de camas en unidades de cuidados intensivos es del 99% a nivel nacional y la de hospitalización bordea el 70%.

Una sola dosis en personas que ya se infectaron

En países como Colombia las autoridades decidieron inyectar con una sola dosis de la vacuna de Pfizer a personas que ya se infectaron con COVID-19. Cané afirma que esto no sería prudente.

“En el estudio clínico que realizamos invitamos a participar a personas que tuvieron el virus y las que no, y determinamos que la eficacia había sido exactamente igual entre personas que nunca tuvieron la infección y las que sí. Por esta razón, una persona que se infectó debe recibir las dos dosis, es la recomendación”, informa el especialista.

Vacunación en niños y mujeres embarazadas

Las vacunas contra el COVID-19 han mostrado ser altamente efectivas durante el embarazo, según un estudio recientemente publicado en la revista American Journal of Obstetrics and Gynecology. El estudio también ha permitido comprobar que las madres que han sido vacunadas transmiten una apreciada inmunidad a sus recién nacidos.

Un grupo de investigadores de Massachusetts estudió la respuesta de mujeres embarazadas a dos vacunas, la de Pfizer/BioNTech y la de Moderna.

Si bien el reducido número de mujeres incluidas en este estudio (131) es un factor limitante, proporciona información temprana muy importante sobre la seguridad y eficacia de la vacunación durante el embarazo.

Gabriela Dávila, directora regional de Investigación Clínica de Pfizer para México y para América Latina, comenta que son alentadores los primeros resultados en este grupo, pero que aún se siguen realizando estudios y que pronto tendrán resultados más detallados.

Sobre la vacunación en menores de 16 años, la especialista indica que se están realizando las investigaciones, en especial sobre cuál sería la dosis ideal para este grupo etario, ya que, por lo general, las dosis siempre son algo más reducidas para los infantes que para los adultos.

Los primeros participantes del ensayo clínico ya han recibido la inyección inicial de esta vacuna, que desarrolló Pfizer junto con la alemana BioNTech. Los niños empezarán a recibir una dosis de 10 microgramos del suero para aumentarla progresivamente, aunque los participantes también tienen la opción de elegir la dosis de 3 microgramos, en comparación con las dos dosis de 30 microgramos que reciben los adultos.

Dávila, al igual que Cané, hace un llamado a la ciudadanía para que se vacune, ya que mientras más personas se inoculen más rápido los países podrán conseguir la ansiada inmunidad de rebaño y proteger a los más vulnerables. En países como Ecuador el nivel de ausentismo en las citas para inocularse ha llegado hasta el 30%. (I)