“Yo vi complicada la situación porque no tenemos internet, ni computadora y encima el riesgo de que por salir vayamos a contagiarnos. Fue difícil, pero era preferible cuidar la vida y esperar a que esto (pandemia) pasara”. Es el testimonio de Esther, madre de familia del sector rural de Guayas, cuyo hijo dejó de estudiar este año lectivo por la crisis sanitaria provocada por el COVID-19.