Imagine una extensa zona rodeada por montañas divididas por lagunas y quebradas, con pequeños asentamientos de chozas y lugares ancestrales. Así era Quito en 1532, un área con diversas fallas geográficas, un perfecto contraste de los edificios rectangulares, techos y terrazas, enredaderas de cables y el ruido insoportable de los autos con el tráfico que también causa contaminación ambiental actualmente.

Esa larga extensión de montes y lagos ahora es posible que salga del imaginario y que se convierta en una realidad virtual. Un videojuego desarrollado por la Universidad San Francisco de Quito, en colaboración con el Museo del Alabado, permite que los turistas interactúen y conozcan cómo era esta ciudad en esa época.

Un personaje adaptado a dicha época camina por las laderas y tiene la capacidad de convertirse en un ave, por medio de los controles de un teclado las alas de este animal permiten desplazarse al jugador por los diferentes sectores. Con rayos de color amarillo, el mapa georreferencia al usuario para que acuda a los puntos principales del juego y conozca la historia contada por una voz al llegar a cada estación.

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Lo característico del juego también es que se han incluido diez objetos históricos que son exhibidos en el Museo de Arte Precolombino Casa del Alabado, ubicado en el centro histórico de Quito, en las calles Cuenca entre Rocafuerte y Bolívar.

Carlos Espinoza, docente de la USFQ, puntualizó que este trabajo se desarrolló como parte del proyecto internacional Achival City, financiado por el Gobierno de Francia, que tuvo a un equipo multidisciplinario, que incluyó arqueólogos, historiadores, especialista en programación, así como docentes y estudiantes de la universidad. El proyecto les llevó aproximadamente un año.

Explicó que se trata de un trabajo que digitaliza archivos y realiza reproducciones en 3D de ciudades para que puedan dar un paseo virtual por la meseta de Quito y los sitios arqueológicos.

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“Hay unas misiones que establecen búsqueda de objetos valiosos, la idea es generar un dispositivo pedagógico que ofrezca una experiencia inmersiva e interactiva y que llegue a los jóvenes que están acostumbrados a percibir el mundo a través de la imagen más que de la lectura”, agregó.

QUITO.- Un videojuego realizado por un equipo multidisciplinario permite conocer cómo era la meseta de Quito en 1532. Foto: Captura del demo de juego

De momento solo podrán jugar este videojuego los turistas que accedan a este museo, como parte de una de las actividades que se pueden realizar en este lugar. Aunque caminar por los pasillos de esta histórica construcción y degustar de un café o postre en el patio principal también prometen una experiencia singular en una de las construcciones coloniales que tiene este casco antiguo.

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Lucía Durán, directora del Museo de Arte Precolombino Casa del Alabado, señaló que significó un placer para este lugar el contar con un videojuego que permita dar a conocer el territorio en un momento muy importante, justo en la época previa a la conquista de este poblado.

“La precisión histórica en el videojuego es muy importante, es basado en investigación que además pone en valor piezas del museo, algunas piezas de la colección están en el videojuego para ser exploradas, indagadas, investigadas, para sacar al público joven en especial a la maravillosa historia que tiene Quito”, puntualizó.

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Lugares como Cumbayá, valle de los Chillos, Machángara, la Casa de Atahualpa, el volcán Pichincha, Pomasqui, Catequilla, Zámbiza, Guayllabamba, las Tolas de Cochasquí, entre otras zonas pobladas por la cultura inca, forman parte del recorrido interactivo que se puede realizar.

Mireya Salgado, profesora investigadora de Flacso Ecuador, puntualizó que el desarrollo de este tipo de herramientas interactivas es fundamental para el estudio de la historia nacional. “Tenemos un problema en este país de que los adultos y jóvenes tenemos muy poca relación con nuestro pasado, con la historia, si bien hay investigaciones, estas no llegan al público”, recalcó.

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Además, añadió que el patrimonio que tiene este país es tan rico y desconocido que estas nuevas opciones permitirán conectar a los ciudadanos con el conocimiento de una manera más lúdica. (I)