Un juez de Esmeraldas dictó sentencia de seis años con seis meses de internamiento institucional de régimen cerrado a un adolescente al comprobarse su colaboración en el delito de secuestro extorsivo en contra de un taxista.

El suceso se registró el pasado 20 de julio. Aquel día, Julio T. se encontraba transitando en su taxi por la zona del parque de Las Palmas cuando un sujeto le solicitó una carrera hasta el sector del barrio Nuevo México.

Al encontrarse en el lugar fue interceptado por cinco personas armadas.

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El taxista fue maltratado físicamente y verbalmente con la finalidad de robarle el automóvil. Los secuestradores lo condujeron a un domicilio de ese sector, donde le pusieron una capucha y ataron las manos para seguir con las agresiones. También lo forzaron a desbloquear su celular y dar las llaves del auto.

Luego se comunicaron con su familia para solicitar una cantidad de dinero para su liberación, manteniéndolo secuestrado hasta que el objetivo se concrete.

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La víctima reconoció el rostro de sus captores en este delito, mientras le exigían sus pertenencias.

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A él lo dejaron en ese domicilio al cuidado del adolescente hoy sentenciado, que fue identificado durante la investigación. Finalmente, la víctima fue encontrada y los involucrados aprehendidos.

El fiscal del caso reveló la reproducción del testimonio de la víctima y de los especialistas que realizaron los informes médico-legal y el peritaje del reconocimiento del sitio y levantamiento de evidencias físicas, audio, video y afines, entre otras pruebas.

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La sentencia está ligada a lo indicado en el artículo 385, numeral 3, del Código de la Niñez y Adolescencia. La ley sanciona con pena privativa de libertad para los delitos condenados con pena privativa de libertad mayor a diez años, se empleará la medida de amonestación e internamiento institucional de cuatro a ocho años. (I)