Las pérdidas del sector exportador superan los $ 10 millones por la paralización en Ecuador

A los camiones que transportan los productos de exportación les bajan las llantas, les rompen los parabrisas, les obstruyen el paso para llegar al aeropuerto, les piden que paguen por salvoconductos para poder transitar, los manifestantes convocados por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) que desde el lunes cierran vías y protestan en varios puntos del país, sobre todo en la Sierra, van a las puertas de las fincas para que los trabajadores salgan y se unan a las protestas. Y eso ya deja pérdidas en exportaciones de más de $ 10 millones.

Noticias relacionadas

Cada día de paralización, el turismo de Ecuador pierde de $ 2 millones a $ 5 millones

‘Nos están exigiendo que paguemos por salvoconductos para poder sacar nuestros productos’: Expoflores denuncia extorsión en protestas

Una a una los sectores productivos están documentando estas denuncias para presentarlas a la Fiscalía. La más reciente es el video de dos indígenas que le dan media hora de plazo al ingeniero a cargo de una finca, porque quieren que si ellos están en paro, todos plieguen a la medida.

Cada día de los cuatro que llevan las protestas se reportan estas mismas situaciones. Las afectaciones del sector exportador ascienden a $ 3,2 millones al día, principalmente por la oferta que se produce en la Sierra como brócoli, tableros de madera, flores, frutas y hortalizas. Es decir que al momento ya superan los $ 10 millones.

El presidente de la Federación de Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), Felipe Ribadeneira, indica que la afectación económica se mantiene igual. Cuenta que la noche del miércoles 15 de junio se intentó pasar los bloqueos en convoy por el lado de sur de Quito, pero “no hubo manera de pasar a Alóag, y a pesar de que hubo el apoyo de la fuerza pública, de la Policía Nacional, solo se pudo reenviar al puerto de Guayaquil vía Calacalí. Lamentablemente siguen las mismas afectaciones y esperamos que este se solucione pronto”.

El sector insiste en su llamado al diálogo. Y desde el Comité Empresarial Ecuatoriano se emprende la iniciativa de una marcha digital con el mensaje “Yo no paro. Yo trabajo”. El presidente de este gremio, Miguel Ángel González, indica: “Paralizar la economía con violencia es inconcebible. Protestar es nuestro derecho, pero agredir no lo es. Los que estamos en contra del paro violento deberíamos marchar en las calles para mostrar que somos mayoría, pero estamos ocupados trabajando y las circunstancias no lo permiten”.

Y por ello pide que quienes estén de acuerdo compartan ese mensaje para que se escuchen las voces en contra de la violencia, a través de las redes sociales. “Ecuador necesita trabajar, no coatizar. Construir, no destruir”.

Este jueves, 16 de junio, la Asociación Nacional de Productores y Exportadores de Flores del Ecuador (Expoflores) denunció públicamente el plazo que daban a una finca en Pastocalle para que dejen de trabajar. En el video se escucha a uno de los manifestantes decir: “Damos media hora, máximo una hora, porque aquí existe trabajando la gente y nosotros luchando y ustedes siguen trabajando. Damos media hora, si no caso contrario acabamos la empresa”.

Solo en las florícolas que estima una pérdida diaria de $ 2 millones por la carga que no logra llegar al aeropuerto.

También reportó que miembros de la Unión de Organizaciones Campesinas e Indígenas de Cotacachi (Unorcac) impedían el ingreso de trabajadores a las fincas. Y que continuaban los bloqueos de vías en la entrada a Cangahua y Bola de Guachalá.

La noche anterior en el peaje de Cochasqui eran más de sesenta camiones con producción esperando transitar. El 15 de junio se denunció la exigencia de salvoconductos pagados para que las empresas puedan movilizar su carga por las vías tomadas por los manifestantes. Ese día también se mostraron fotos de los camiones que intentaron pasar desde Cayambe y Tabacundo y que fueron atacados, les rompieron parabrisas y les escribieron “fuera Lasso”.

Y es que los manifestantes portan varillas y ponchan las llantas de los vehículos que intentan transitar por las vías cerradas por ellos. Una mujer que necesitaba regresar a su ciudad, Quito, contó que tuvo que decir que necesita volver para cuidar a su hijo y darles $ 20 para que la dejaran seguir su camino.

Desde el lunes 13 de junio que comenzaron las protestas convocadas por la dirigencia indígena se muestran imágenes de los manifestantes ingresando a las fincas de Cotopaxi, en los sectores de José Guango, Lasso, Piedra Colorada y Guaytacama, exigiendo a los trabajadores que se sumen a las protestas.

En ese primer día la empresa Provefrut -que produce brócoli, coliflor, espinaca y otros vegetales- denunció el ataque a su planta industrial en esa provincia por parte de un grupo de protestantes y que eso puso en riesgo a sus colaboradores, afectando el normal funcionamiento de la empresa. Tuvieron que pedir resguardo policial para poder evacuar a sus trabajadores de la planta. (I)