Un día después de que la reforma tributaria entró en vigencia a través del Registro Oficial 355 del 20 de junio, el sector exportador expuso sus observaciones no sobre el contenido de la reforma en sí, sino sobre el supuesto efecto que esta generaría en otros ámbitos económicos para financiar la misma, como la supuesta intención del Gobierno de reducir o excluir a varias subpartidas arancelarias del beneficio del crédito tributario por el pago del impuesto a la salida de divisas (ISD).