Olores agradables, entre dulces, cítricos y florales envuelven las instalaciones de la planta de fabricación de fragancias, desodorantes y muestras en saché de Yanbal, ubicada en el norte de Quito. La planta -inaugurada hace 22 años- a ratos se parece a un quirófano, debido a la limpieza y exactitud con la que trabajan sus empleados; también se la compara con una cocina, donde se sigue al pie de la letra las recetas para la elaboración de cada perfume con la cantidad exacta de escencias, de mezcla y coloración. La planta cuenta con la Certificación de Buenas Prácticas en manufactura cosmética.