El Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) envió una carta al presidente Lenín Moreno sobre las movilizaciones indígenas que culminaron el pasado domingo con un acuerdo donde la institución participó como mediadora.

En el texto se señaló que el domingo 13, cuando los indígenas levantaron la protesta, el país encontró una ruta para recuperar la calma anhelada.

Para la CEE, hubo dos enseñanzas: la paz y el respeto a la vida son valores intrínsecos del pueblo que se debe amar y defender; y que el diálogo es el camino apropiado para superar las tensiones así como los conflictos familiares, sociales y políticos.

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"La imposición de leyes y la violencia generalizada tan solo causan heridas, pérdidas de vida y destrucción de bienes", indicaron los religiosos.

Y ante el anuncio presidencial de un veto al Código Orgánico Integral Penal (COIP), la Iglesia católica sostuvo que no es el momento de abrir nuevas heridas y confrontaciones.

"En tal virtud, tratar de imponer,  por medio de un veto, como la ampliación de causales para despenalizar el aborto, que no fueron aprobadas por la Asamblea, puede generar otro descontento social. Una injusticia no se soluciona con otra injusticia", opinó la CEE.

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Por ello, apelaron a lo que llaman gran sensibilidad social y firme decisión de Moreno de respetar los procedimientos constitucionales y legales. (I)