El anuncio de Juan Guaidó de su regreso a Venezuela tuvo eco en el país petrolero. En redes sociales diversos sectores políticos y sociales, activistas y líderes locales convocaron a las movilizaciones hoy, a las 11:00, tal como lo pidió el líder opositor, un día antes, desde Ecuador, último destino de una gira que lo llevó también a Brasil, Paraguay y Argentina.

La expectativa y la tensión por la llegada de Guaidó aumentan y la incertidumbre también se impone ante el abanico de escenarios que se pueden dar.

El chavismo, liderado por Nicolás Maduro, ya amenazó que Guaidó será detenido por haber ignorado la prohibición de salida del país que le había impuesto el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).

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El regreso del opositor, reconocido por unos 50 países como presidente interino, supone un reto para Maduro, quien deberá decidir si arrestarlo y provocar una fuerte reacción internacional o dejarlo entrar tranquilo, socavando la autoridad del poder Judicial, publicó AFP.

El TSJ y la Fiscalía General, aliadas del Gobierno, abrieron investigaciones contra Guaidó, acusándolo de ‘usurpación’ de funciones.

EE.UU. y los países del Grupo de Lima han expresado su preocupación por la seguridad de Guaidó. Aún no está claro desde qué país entrará.

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“El desafío ha llegado muy lejos. Si entra y lo detienen, se van a generar fuertes reacciones internas e internacionales. Maduro está en riesgo permanente”, aseguró el analista político Luis Salamanca.

“Debe regresar a Venezuela y continuar presionando en lo interno, ya que en lo internacional el respaldo es gigantesco. Estamos ante un panorama muy delicado y cada minuto que pasa nos acercamos a un desenlace que esperamos no sea catastrófico”, dijo Eufracio Infante, abogado y profesor de historia.

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La Unión Europea advirtió que “cualquier medida que pudiese poner en riesgo la libertad, la seguridad o la integridad personal representaría una gran escalada de tensiones y merecería la firme condena de la comunidad internacional”.

El gobierno estadounidense de Donald Trump, que no descarta una opción militar en Venezuela, también advirtió que si algo le sucede a Guaidó habría “serias consecuencias”.

“Guaidó ha crecido tanto políticamente que Maduro no lo ha podido tocar, a la manera tradicional del chavismo, meterlo preso u obligarlo a huir del país, hostigarlo”, opinó Salamanca.

Detener a Guaidó tendría repercusiones internas y externas imprevisibles, entre ellas el estallido de un nuevo ciclo de protestas, publicó elpais.com. (I)

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