El movimiento Alianza PAIS (AP) continúa hoy en Guayaquil su campaña de carnetización “puerta a puerta”, que empezó el pasado sábado.

Se denomina ‘Plan Revoluciona País’, y la semana pasada generó críticas por la presencia de instituciones del Estado en el sector donde fue la jornada.

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Las asambleístas de AP Marcela Aguiñaga y Mónica Brito impulsaron ese día la carnetización de simpatizantes, en el Guasmo sur. Así lo informaron ellas en sus cuentas de Twitter, en las que compartieron fotos.

Se las ve entregando carnés de afiliación a simpatizantes.

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Otras imágenes publicadas ese día por el asambleísta oficialista Bairon Valle muestran como varias instituciones del Estado ofrecen servicios, como el de salud, o proyectos, como el de las cocinas de inducción.

Él tuiteó: “Coop. #Florida2 #GuasmoSur de #Guayaquil recibe asesoramiento de instituciones. @CNEL_EP @IESSec @CNT_EC #MSP”.

Ayer, al ser consultado sobre la feria y su participación en la carnetización, Valle contestó a EL UNIVERSO que él no había asistido el pasado sábado por estar “con descanso médico”.

Indicó que hoy recorrerá el barrio Coviem, en el sur de Guayaquil, como parte de esta campaña “puerta a puerta”, que aseguró es “de todos los días”.

Su coideario Octavio Villacreses justificó ayer a Aguiñaga y Brito, en Ecuavisa.

“Están haciendo un trabajo político, sí; probablemente se pueda leer como una campaña proselitista pero es una suma de esfuerzos”, dijo en entrevista.

Luis Serrano, del movimiento Salud y Trabajo, opinó que el Consejo Electoral y la Contraloría deberían ‘actuar’ por el “uso de bienes del Estado en proselitismo político”.

Aguiñaga rompió su silencio al respecto el jueves cuando describió la jornada como “la reunión de personas y grupos laborando por la idea del cambio, que aportan con su lucha permanente a crear mejores condiciones de vida y desarrollo para los ecuatorianos”, en un texto en el que descalifica una crítica que le hace en “4 pelagatos” el periodista Roberto Aguilar.

El periodista respondió en su espacio que “con tal de no responder, se inventa usted cualquier cortina de humo”. Y añade: “No niega usted que esa publicidad existe; no niega usted su contenido; no niega usted la desvergüenza de haber usado las instituciones del Estado con propósitos ruines; no niega usted haber estado ahí y haber hecho lo que esa publicidad anuncia. Es más: se enorgullece de ello”. (I)