Un trastorno neurológico raro, del que no existen 100 casos documentados desde que se reconoció por primera vez en 1904, tiene a un hombre en particular sumergido en un extraño plano en el que ve sumamente distorsionados los rostros de quienes le rodean. Él lo describe como un “mundo demoníaco”. Sí... él ve en otros “caras demoníacas”