La incorporación de bebidas naturales en la dieta diaria es una práctica que puede ofrecer numerosos beneficios para la salud cardiovascular, como es el caso del jugo de tomate.

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Los jugos en general no solo hidratan, sino que también proporcionan una concentración de vitaminas y minerales esenciales para el funcionamiento óptimo del cuerpo.

Entre ellos, el jugo de tomate destaca por sus propiedades antiinflamatorias y su riqueza en nutrientes como la vitamina C y el licopeno.

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Jugo de tomate. Foto: Freepik.

Este último, un antioxidante poderoso, ha demostrado ser eficaz en la regulación del colesterol y en la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares, menciona el portal Healthline.

¿Qué beneficios tiene el tomate?

La Fundación Española de Nutrición (FEN) enfatiza que el tomate contiene hidratos de carbono y es una fuente significativa de vitamina A, en forma de carotenoides que son esenciales para la salud ocular y la integridad de la piel.

La FEN agrega que la absorción del licopeno se potencia cuando el tomate está triturado o cocinado, especialmente si se combina con aceites saludables, lo que facilita su integración en el organismo y maximiza sus efectos beneficiosos.

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Adicionalmente, beber una taza de jugo de tomate (de 240 ml) puede cubrir casi completamente las necesidades diarias de vitamina C y proporcionar una cantidad importante de vitamina A, gracias al alfa y betacarotenoides que contiene, explica Healthline.

Salsa de tomate casera. Foto: iStock

El portal de salud antes citado señala que los carotenoides no solo se convierten en vitamina A en el cuerpo, sino que también actúan como antioxidantes, protegiendo las células del estrés oxidativo causado por los radicales libres.

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Esto es crucial para prevenir el envejecimiento prematuro y ciertas enfermedades crónicas.

Los beneficios de comer tomate todos los días

El jugo de tomate también es rico en magnesio y potasio, minerales que desempeñan un papel vital en la salud cardiovascular.

Estos antioxidantes, incluyendo el licopeno y el betacaroteno, son fundamentales para reducir los factores de riesgo asociados con enfermedades cardíacas, como la hipertensión arterial, el colesterol alto y la aterosclerosis.

Los tomates y sus derivados, como el zumo de tomate, son responsables de más del 80% del licopeno consumido por los estadounidenses, apunta el portal de salud.

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Jugo de tomate para adelgazar

El jugo de tomate es una opción excelente para las personas que buscan controlar su peso, el licopeno también contribuye a regular el colesterol e incluso, reducir la circunferencia de la cintura en mujeres, según refiere Healthline.

El portal antes mencionado cita un estudio realizado durante dos meses con 30 mujeres en lo que se determinó que el consumo de jugo de tomate contribuyó positivamente en disminuir la inflamación.

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La investigación reveló que aquellas que ingirieron diariamente 1,2 tazas (280 ml) de jugo de tomate, con un contenido de 32,5 mg de licopeno, experimentaron una disminución significativa en los niveles de adipocinas, proteínas inflamatorias en la sangre.

Asimismo, estas mujeres mostraron un incremento notable en los niveles de licopeno, así como una reducción considerable en los niveles de “colesterol y en la circunferencia de la cintura”, señala Healthline.

Jugo de tomate. Foto: Freepik

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Cómo hacer jugo de tomate para bajar el colesterol

Elaborar jugo de tomate en casa es una forma deliciosa y nutritiva de disfrutar de los beneficios de esta fruta.

Comience por cocinar cuatro tomates frescos y grandes durante 30 minutos a fuego medio o hasta que se suelte la cáscara.

Una vez que se hayan enfriado, procesar los tomates en una licuadora hasta obtener la textura que prefiera, ya sea suave para beber o más espesa para usar como base de salsas.

Tomates. Foto: Freepik.

Para enriquecer el sabor y el valor nutricional, Healthline recomienda añadir vegetales y hierbas como apio, pimientos rojos y orégano. También puede agregarle aceite de oliva si prefiere, menciona El País.

El jugo de tomate no es solo una bebida refrescante, sino también un complemento nutricional que puede mejorar la salud general. (I)

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