Desde tiempos inmemoriales, el cabello ha sido una expresión de identidad, cultura y estatus. A medida que las sociedades han avanzado, el arte de la coloración capilar ha evolucionado, reflejando las actitudes, tecnologías y eventos predominantes de cada época. En décadas recientes, la relación entre las personas y su cabello ha sido influenciada por factores diversos como la música, el cine, la tecnología y las redes sociales.

Durante los años 60, por ejemplo, el cabello largo y natural dominaba la escena, simbolizando la liberación y la revolución cultural. La década de los 70 trajo consigo la popularidad de los tintes en casa, permitiendo a más personas experimentar con una variedad de tonos sin la necesidad de visitar un salón. Los 80 nos regalaron los colores audaces y las mechas pronunciadas, mientras que los 90 nos trajeron tonos más naturales y la adopción de mechas más sutiles, como las lowlights.

Con la llegada del nuevo milenio, las posibilidades se expandieron. La tecnología de la coloración avanzó, permitiendo colores más duraderos y menos dañinos. Las redes sociales, por su parte, aceleraron la velocidad a la que las tendencias podían propagarse, permitiendo que estilos de una parte del mundo se adoptaran rápidamente en otra.

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El 2023, al igual que años anteriores, es un reflejo de esta confluencia de pasado y presente. La fusión de la nostalgia de décadas pasadas con las innovaciones y realidades actuales ha llevado a una paleta de colores enriquecida y versátil. El cabello sigue siendo una forma de expresión, y la peluquería DKC es testigo de que, aunque las tendencias cambien, la esencia permanece. Esto se evidencia en la avenida Samborondón, donde hace ocho años nació dicho salón de belleza en una casa privada. DKC atiende a clientes con pedidos de coloración a diario. Según Karina Contreras, su propietaria, “cada día serán más las personas que quieren darse un cambio de look”, enfatiza en que “nos visitan muchos cabellos vírgenes queriendo darle luz al cabello”.

El local tiene un sinnúmero de coloristas que están al día con las tendencias de cabello. “Todos los días tenemos citas de tinturado, sean tintes de crecimiento, de raíz o diseño de color. Los clientes de diseño de color nos visitan cada seis meses, y las del crecimiento, cada mes y medio”.

Estar rodeada de clientes le ha permitido a Contreras anticipar próximas tendencias y notar cuál teñidura es la más popular del momento.

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En cuanto a color, explica que su cartera de tinturados en su mayoría es de adultos de 30 a 50 años. “Siempre buscan colores naturales; tenemos clientes rubias, pero predominan los colores naturales”.

Una técnica popular para la coloración de cabello en la actualidad son los contornos, explica, pues las personas quieren afinar un poco su rostro con esta técnica.

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Una tendencia en crecimiento es sin duda el uso de tintes orgánicos: “Muchas personas hoy en día prefieren proteger su hebra capilar y que el color les dure más de una forma más natural, con menos químicos”, añade.

María del Rocío Hernández, gerente de Peluquerías Chio, resalta la naturalidad que buscan sus clientes: “Piden highlights beige y balayages rubios. La mayor tendencia son los balayages naturales”. Su predicción para el 2024 son los colores naturales, no tan intensos y que tienden a ser más rubios. “Los tonos rubios los piden mucho más que antes”, dice la empresaria, de 42 años.

“Instagram influye totalmente en las decisiones de color para nuestra clientela, y la siguiente más importante es Pinterest”, agrega Hernández, acostumbrada a que los usuarios muestren una foto de referencia, extraída de internet.

Una tendencia favorita del público nació así: las mechas chunky, que aunque tuvieron su momento, la experta opina que “son muy marcadas para volver en estos años que buscamos más naturalidad”.

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Contreras cree que el balayage fue tendencia hace muchos años y lo sigue siendo en la actualidad: “Tal vez la mezcla de contornos con balayage es lo que esperamos ver en los próximos años”.

A nivel global se empiezan a ver las tendencias para el 2024, que también se inclinan por los rubios:

  • Rubio néctar: posee ese matiz cálido encantador que realza el rostro.
  • Rubio arena: es un beige con un suave toque dorado, ideal para aquellos cabellos que desean aclararse.
  • Rubio vainilla: es suave y consigue aportar un gran brillo al cabello.
  • Rubio hielo: atrevido, misterioso e interesante.
  • Rubio tostado: contrasta con una base más profunda, buscando dimensión.