Había terminado la guerra que dizque iba a acabar con todas las guerras en cosa de pocos meses, y que terminó siendo un infierno de cuatro años donde fallecieron millones de personas. Corría 1919. Cosas extrañas ocurrieron. Un joven de nombre Walter Benjamin, que había sobrevivido a la gripe de 1918, se escapa de su hogar para liberarse de su tiránico padre. Otro joven llamado Ludwig Wittgenstein toma la increíble decisión de no aceptar la enorme fortuna que le tocaría como descendiente de una de las más familias más ricas de Europa, para dedicarse a reflexionar con claridad.