Dos farmacias ubicadas en los alrededores del hospital Guayaquil Abel Gilbert Pontón fueron clausuradas en días recientes por la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa), al detectarse medicamentos de contrabando, productos sin registro sanitario y fármacos con etiquetas adulteradas.
El operativo, realizado junto con la Gobernación del Guayas, incluyó la inspección de siete locales. Más de 100 medicinas con irregularidades fueron retiradas.
Publicidad
Ante este escenario, pacientes y acompañantes consultados en los exteriores del hospital coinciden en que los controles son necesarios, aunque advierten que para el Ministerio de Salud también es urgente revisar lo que ocurre con el abastecimiento de insumos y medicinas en el sistema público de salud.
“Deben hacer más controles”, dijo una ciudadana, que acompañaba a su padre en tratamiento oncológico, respaldando los operativos.
Publicidad
Sobre la farmacia interna del hospital público, algunas pacientes dicen sentirse seguros con lo que reciben, aunque con ciertos insumos o medicinas tienen dificultades para el acceso.
“Hasta aquí no me quejo. Toda la medicina de oncología me la han dado bien. Cuando falta algo, compro afuera en distribuidoras conocidas”, comenta María, una usuaria que asegura no haber tenido inconvenientes.
A su vez, Blanca Mejía, quien acudió por atención médica, insiste en que los operativos deben intensificarse en las farmacias de los alrededores de casas de salud.
“Se debe hacer más seguido. Imagínese, si venden medicinas adulteradas nos pueden hacer daño, sobre todo a quienes tenemos otras enfermedades”, advierte.
Y es que en semanas anteriores, un operativo similar detectó otros insumos y medicamentos irregulares afuera del hospital de Monte Sinaí.
Clausura de farmacias en alrededores
Según Arcsa, en una de las farmacias se encontraron cerca de 100 ampollas de tetanol sin registro nacional, presuntamente ingresadas de contrabando y que requieren cadena de frío para conservar su eficacia.
En la segunda se hallaron frascos de norepinefrina con etiquetas manipuladas, fechas de caducidad alteradas y la leyenda “Uso institucional” borrada, lo que hace presumir que serían medicamentos desviados de hospitales.
En lo que va del año, Arcsa ha retirado más de 50.000 productos irregulares en los alrededores de 230 hospitales públicos, y más de 700.000 medicinas y dispositivos médicos a escala nacional.
Mientras tanto, en los exteriores del hospital Guayaquil, la preocupación es compartida: los ciudadanos piden que los controles continúen en las farmacias, pero también que se refuercen dentro del sistema público para evitar que los medicamentos escaseen o terminen desviados al mercado irregular.
Problemas en hospital público
Para algunos usuarios, la escasez de ciertos medicamentos o insumos es reiterado en el sanatorio público.
Una paciente que esperaba turno resume: “No hay varias cosas. A veces mandan a comprar todo afuera. No podemos opinar mucho, solo que sí deben hacer más controles porque falta medicina”.
Otra usuaria, que prefirió no dar su nombre, añade que la falta de insumos afecta incluso a quienes necesitan pruebas especializadas.
“Aquí no hay nada. Para una operación, todo toca comprar afuera. Las máquinas demoran siglos para dar un resultado. Que vengan más autoridades, hace falta”, reclama.
Grisalia Benalcázar, paciente oncológica, considera que las autoridades de Salud también deben intensificar los controles y revisiones del abastecimiento en la casa de salud para asegurar que sea óptimo.
“Está bien que controlen, pero también deberían hacer inspecciones dentro del hospital”, remarcó.
Cuenta que, por la falta de stock, en ocasiones se ha visto obligada a comprar medicinas afuera, aunque en su experiencia no ha recibido productos caducados.
“A veces aquí no hay ni lo básico, como hilos para suturar o bisturí. He tenido que hacerme exámenes particulares porque no hay reactivos”, señala.
Relató que su proceso oncológico se ha complicado por la escasez económica. “Necesito más de $ 600 para tomografías y resonancias. Si no pago, debo esperar meses. Yo no puedo esperar, es cáncer”, dijo.
Entre los planes gubernamentales, en estas semanas, el Ministerio de Salud impulsa la compra de medicinas y equipos médicos por emergencia para enfrentar el desabastecimiento acumulado en el sistema público.
A mediados de noviembre anterior, el Gobierno anunció que se daba la distribución a escala nacional bajo supervisión de la cartera de Estado. Pacientes esperan que la situación mejore con este programa estatal. (I)