“Tengo 56 años, pero una piel de 51, bótox por primera vez en mi vida, ¡ay, qué emoción!”, compartió Marián Sabaté en sus redes sociales al entrar a la clínica que le realizaría este tratamiento estético por primera vez en su vida.
Marián optó por un centro localizado en la vía a Samborondón y que también tiene sede en Los Ceibos y en Manta. Solo necesitó removerse el maquillaje antes de que las agujas perforen su piel.
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En 5 minutos le aplicaron la toxina botulínica en el tercio superior del rostro y en el cuello. “Esto de aquí lo ponemos cada cuatro meses, pero empiezas a ver cambios al tercer o cuarto día y el efecto final en 15 días, donde te evaluamos si necesitas un poquito más o si hay que corregir algo”, le comentó su especialista.
“Uno de los efectos del bótox es que no solo te mejora las arrugas del movimiento sino que también a la piel le da luminosidad, se ve más aperlada”, informó la experta. “Se acabó esta pantomima que les dije que ya 56 años y no me he tocado la cara”, expresó la ‘reina de la prensa rosa’ llena de emoción por ver cómo le quedará el rostro.
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“Fue totalmente indoloro, por lo que lo describe como un procedimiento milagroso, “lo mejor que puede hacer” dijo Marián que, como siempre, bromeó con su vida amorosa: “Ahora sí consigo novio gracias a mis queridas amigas”.
Como parte del efecto, el rostro de Los hackers de la farándula tuvo que mantener su cuello elevado durante cuatro horas luego de recibir la toxina, por lo que decidió ver una película junto a su hijo Alejandro Kenig mientras comían sushi, ayer por la noche. (E)