Se considera un lector voraz. Así lo afirma el escritor y abogado Salvador Íñigo. “Yo estoy todo el tiempo leyendo, a pesar de mis ocupaciones públicas, yo leo todo el tiempo, yo no me puedo ir, por ejemplo, en las noches a la cama sin antes haber leído por lo menos una hora, es una forma también de desconectarme de las preocupaciones del día, sumergirme en el libro de literatura que estoy leyendo, porque eso es lo que leo cuando leo en las noches”, dice.