El juez Michael Jesic del Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles ha dictaminado que los hermanos Menéndez, encarcelados en 1996 por el asesinato de sus padres, serán condenados nuevamente a entre 50 años y cadena perpetua, este martes 13 de mayo.

Esto los hace elegibles de inmediato para libertad condicional y sería un camino para su posible liberación, según informes de NBC News.

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Lyle, ahora de 57 años, y Erik, de 54, fueron condenados a cadena perpetua sin libertad condicional por disparar fatalmente a sus padres, José y Kitty Menéndez, en el estudio de su casa en Beverly Hills (California) el 20 de agosto de 1989.

Los asesinatos, según los hermanos, se produjeron tras años de abuso sexual por parte de su padre, situación que, según afirman, su madre ignoró.

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Tras dictar la nueva sentencia, el juez declaró haber reflexionado sobre el asunto durante mucho tiempo, reconociendo que cometieron un crimen absolutamente horrible, y que no hay otra opción, pero dijo que le conmovió la conducta de los hermanos tras las rejas.

Retrato familiar de los Menéndez. Los hijos Lyle y Kyle a los lados, en el centro los padres José Enrique y Mary Louise 'Kitty'. Foto: Wikimedia

“La cadena perpetua sin libertad condicional no le da a un recluso ninguna esperanza, ningún motivo para hacer algo bueno. Y les doy mucho crédito. Es extraordinario lo que hicieron cuando no tenían ninguna esperanza de salir”, dijo este.

El abogado defensor principal de los hermanos, Mark Geragos, elogió la decisión y afirmó: “Quiero agradecer al juez, quien logró acallar todo el ruido en torno a esto, toda la grandilocuencia, todo el tira y afloja político, e hizo lo que la justicia dictaminó que debía suceder”. Geragos enfatizó que el juez “eliminó una circunstancia especial”, que anteriormente imposibilitaba la libertad condicional.

Geragos agregó: “Lo cierto es que los hermanos Menéndez han realizado un trabajo extraordinario, y hoy es un gran día después de 35 años”.

Y reflexionando sobre el significado más amplio del fallo, dijo: “En un día como hoy, la redención es posible”.

El abogado Mark Geragos abraza a Anamaria Baralt, prima de Erik y Lyle Menéndez, en el Juzgado de Van Nuys Oeste el 13 de mayo de 2025 luego de que el juez Michael Jesic del Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles anunció que resentenciaría a los hermanos Erik y Lyle Menéndez a entre 50 años y cadena perpetua, dándoles la oportunidad de una audiencia de libertad condicional. Foto: AFP

Tras los asesinatos, la fiscalía afirmó que el motivo de los dos hermanos fue la avaricia y mencionó su derroche de dinero tras los asesinatos. Sin embargo, en las décadas transcurridas desde entonces, Lyle y Erik han mantenido que temían por sus vidas y que José los había amenazado de muerte si contaban a alguien sobre el abuso sexual.

Muchos familiares de Lyle y Erik han apoyado abiertamente su solicitud de liberación, incluyendo a su tía materna, Joan VanderMolen. Los familiares apoyaron la solicitud de liberación de los hermanos testificando en la audiencia de nueva sentencia.

El caso resurgió en mayo de 2023 cuando los abogados de los hermanos presentaron una petición de hábeas corpus ante el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles solicitando un nuevo juicio basado en nuevas pruebas.

Las pruebas incluyen una carta que Erik escribió ocho meses antes de los asesinatos, que incluye menciones del presunto abuso sexual y las afirmaciones de Roy Rosselló de que José lo drogó y violó en la década de 1980.

Para octubre de 2024, los hermanos contaban con el apoyo del entonces fiscal de distrito de Los Ángeles, George Gascón, quien recomendó formalmente que cada uno de ellos recibiera una nueva sentencia de 50 años a cadena perpetua, lo que les otorgaba derecho inmediato a la libertad condicional. Sin embargo, Gascón perdió las elecciones de noviembre ante Hochman, quien retiró la recomendación de su predecesor de volver a sentenciar. (E)