Se convirtió en ícono del cine cuando apenas era una niña. Sus chorritos y mirada angelical enamoraron a todo el mundo cuando apareció en un largometraje allá por 1932. Google recordó en su blog oficial que “Temple no solo ayudó a millones de estadounidenses a superar las dificultades de la Gran Depresión como el principal atractivo de taquilla de Hollywood, sino que más tarde compartió su carisma con el mundo a través de su trabajo en las relaciones internacionales”.