Kate Middleton y el príncipe William tratan en todo lo posible de que sus hijos crezcan con la mayor “normalidad” posible. Y en ese afán, el orgulloso papá comparte momentos de calidad con su única hija hembra, la princesa Charlotte.

Una compañerita de clases extendió la invitación a la heredera del trono, y la pequeña acudió a compartir unas horas de total diversión en un espacio que tiene especial significado para su padre: era uno de los sitios en que su madre asistía en su juventud.

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Se trata de la pizzería Il Pagliaccio, ubicada en Londres, donde la “Reina de Corazones” solía pasar al dejar el gimnasio y ordenar unas pizzas, margarita y de salami, para llevarle a sus hijos.

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El príncipe William se luce en su rol de padre junto a Charlotte

Charlotte de 6 años, fue una invitada a la fiesta de su amiguita del colegio Thomas’s Battersea School y apareció como cual otra niña, nada más que con su papá, el duque de Cambridge, quien vistió un suéter rojo y jeans para la relajada ocasión, destacó el Daily Mail.

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Fue más que una sorpresa y así lo recibió algunos de los asistentes, entre ellos el propio dueño de la pizzería, donde se realizó la convocatoria infantil. El hombre no pudo ocultar su sorpresa y le pidió al esposo de Kate una foto para la posterioridad, pero este la rechazó gentilmente, tal vez por seguridad.

El empresario italiano recordó las veces que atendió a la princesa de Gales, cuando tomaba unos minutos para pedir pizzas para llevar, mencionó Teo Catino.

William de 39 años, padre también del príncipe Jorge (8), Louis (3), se vio caminando por el lugar llevando un regalo envuelto en papel rosa, tras dejar a su hija en la fiesta y luego volver por ella.

No cabe dudas que el futuro rey se complace en dividir las tareas de cuidado de sus hijos junto a Kate, por lo que fue una sorpresa muy grata saber que disfruta de estos momentos con sus pequeños.

Pese a que la llegada del integrante de la familia real cumplió con las medidas de seguridad, acompañado por los guardaespaldas, la situación normal que todo padre puede realizar se vio enternecida por el gesto de William de atender a su pequeña hija en una tarde de fiesta.

Charlotte se vio tranquila vestida con un abrigo negro y muy segura caminando por el restaurante, delante de su papá, lo que habla siempre de su espíritu libre y desinhibido. La carismática niña, que algunas veces rompe con el riguroso protocolo del palacio Buckingham, se apreció en el video publicado por el diario La Stampa. (E)

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