A casi tres meses de la trágica caída de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, el pasado 8 de abril, se difundió el informe fiscal que revela las causas de la tragedia que cobró la vida de 236 personas, incluyendo al reconocido cantante Rubby Pérez. También falleció el diseñador Martín Polanco y dejó 180 heridos.
El reporte se divulgó luego del arresto de los hermanos Maribel y Antonio Espaillat, propietarios del local. Según los documentos, se acusa a ambos de “sobrecargar el techo” y de otras negligencias críticas.
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La investigación detalla una “cadena de acciones y omisiones” que reflejan un “patrón sistémico de irresponsabilidad y negligencia”. Entre las fallas se incluyen la falta de permisos, modificaciones estructurales sin base técnica, reparaciones deficientes y la ignorancia deliberada de “explícitas señales de alerta sobre el material que caía del techo y el riesgo inminente”.
Se mencionan otras fallas graves de construcción, como la ausencia de muros de carga y una columna esencial para el soporte del techo, lo que subraya la profunda irresponsabilidad que llevó a la emblemática discoteca a su devastador final. Los fiscales concluyeron que la tragedia era completamente prevenible.
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Las indagaciones además encontraron que Maribel Espaillat fue informada horas antes del colapso sobre la caída de material, pero supuestamente se negó a suspender las actividades. “Ella alegó que no podía hacerlo por la ausencia de su hermano Antonio”, señala el alegato. (I)