Jamil Faour no llegó a la cocina por casualidad, llegó con el temperamento de quien presume talento (porque lo tiene) y con la urgencia de convertirlo en relato. Desde su paso por MasterChef Ecuador, donde su rostro y nombre quedaron registrados en la memoria del público, Jamil supo que la televisión sería solo una plataforma y no el final de su historia. Una que continúa en Munch, su primer restaurante dedicado a los sánduches y hamburguesas, una casa de sabor ubicada en Márbol Plaza (en el km 2,5 de la av. Samborondón).