Por casi un año el muro de Facebook se convirtió en una galería de arte. Los días pasaban, la pandemia azotaba —aún lo hace—, el confinamiento ponía a prueba, pero ellos trazaban el ojo, la nariz y la boca del otro; todo en su deseo de sobrevivir. Consiguieron que más de 1.100 retratos a dúo se colgaran en las redes. Hoy son cuadros expuestos en dos salas del MAAC, esperando a ser contemplados de manera física.