Con la historia de un reencuentro entre exesposos, un misterio, y el alivio del perdón, el escritor riobambeño Juan Cabrera fue galardonado con el Premio Miguel Donoso Pareja, novela corta, con $ 10.000, en la más reciente edición de la Feria Internacional del Libro (FIL) Guayaquil. Su novela se llama Luminosos restos.
Es una obra con “muchos condimentos”, ilustra el novelista, a la vez que explica la sinopsis del título guardando de no revelar algún spoiler: “Dos divorciados se citaron mediante un chat y se encuentran. La novela va a transitar entre intentar olvidar a sus ex mientras se va develando el misterio de un crimen”.
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Entre esos condimentos que sazonan esta producción están, además del perdón, la redención. “Me gusta el tema de los doppelgangers, de tener un gemelo malvado. Esa es una obsesión en mi obra que la he explorado desde diferentes puntos de vista. También la parodia, es un tema que me interesa mucho. Aunque el circo en esta obra no es un elemento principal, pero está presente, porque utilizo el humor. Mis obras se caracterizan por un humor negro y ácido. Creo que una gran culpa necesita de un gran humor”, detalla el escritor más conocido por su seudónimo literario Jakk Cabrera.
Algunos autores dicen que no se puede escribir lo que no se ha vivido y al preguntarle sobre cuánto hay de su historia personal en este título, Cabrera revela su primera profesión: psicólogo clínico, aunque por estos días ya no ejerce.
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“Dominar un tema vivencial puede formar parte de tu ficción. Por ejemplo, el póquer es un pilar fundamental de la novela y yo, si no hubiese sido escritor, hubiese sido un jugador profesional de póquer, sé muy bien el tema. También hablo de la calle, me gusta la calle. Pero desde la primera obra, Lo inextinguible, hasta llegar a Luminosos restos, la ficción autobiográfica se ha ido perdiendo. Solo ya tomo sombras, detalles. Alguna vez salí con una mujer de zapatos azules y hay una mujer de zapatos azules en Luminosos restos, pero no es ella, no, son los detalles que uno conserva para pegar a un personaje”.
En todo caso, invita a interesarse por esta historia. “El crimen del que hablo merecía ser narrado y que al menos exista esa posibilidad del perdón y que el perdón esté en el lector”.
¿Por qué de psicólogo pasó a ser escritor? Por una razón muy sencilla, responde. “La psicología, al ser una ciencia, te exige verdades. La literatura no te pide verdades, eso es lo que me gustó. Narrar lo mismo que yo durante mi corto tiempo que hice terapia, que fui terapeuta, poder explorar lo mismo desde el punto de vista callejero, desde el punto de vista sin tapujos, donde vos puedas desarrollar los temas y de alguna forma con el dolor hacer un poco de arte”.
Jakk Cabrera después del Premio Miguel Donoso Pareja
El novelista revela sus siguientes pasos tras esta victoria: publicar el texto de Luminosos restos, que aún no está disponible para el público, por medio de la editorial Alectrión (Quito). Bajo este sello, de hecho, ha publicado sus otras obras, con la cual ha recibido sendas distinciones y menciones honoríficas, tal como cuenta el autor justamente desde el estand de dicha editorial, donde él estará hasta mañana (la FIL se desarrollará hasta el domingo 22 de septiembre).
“Esta novela es la cuarta que publiqué el año pasado con Alectrión, está premiada en Los Ángeles con una mención”, cuenta señalando su penúltima obra, En la mitad está el reino. En cuanto a Luminosos restos, añade: “Quiero terminar este año en las ferias nacionales y también en las internacionales que va Alectrión con esta novela. Y una vez que termine este proceso, el otro año ingresará a corrección y todo lo demás que conlleva la publicación, pero por el momento no me quiero apresurar”.
A decir verdad, Cabrera adelanta que en los próximos doce meses se ‘desintoxicará’ de la escritura. “Hace un mes estaba como loco, porque me decía ‘¿por dónde puedes ir?, ¿qué voy a escribir ahora? Pero ahora me tranquiliza (esta decisión), creo que el escritor merece su espacio y por ahí digamos descansar”.
Por lo pronto tiene otra novela terminada, que en cualquier momento verá la luz, y su prioridad es un proyecto novedoso que a través de una suscripción facilita una especie de alquiler de libros.
Una editorial digital para ‘alquilar’ libros propone Jakk Cabrera
“Ahora estoy con una editorial digital que se llama Lectoriz. Es un proyecto que estamos montando con unos amigos desde hace un año. Es una especie de Netflix de libros, donde vamos subiendo cada mes dos o tres libros a la aplicación y vos podés tener acceso, por 13 dólares al año, a todos los libros que están subidos”, describe Juan Cabrera sobre esta app que está al momento en Play Store (Android).
Es un proyecto editorial sin duda, porque tal como se lo han propuesto con su equipo, implica la reedición de los textos disponibles, incluyendo ilustraciones propias. La iniciativa fue presentada en un lanzamiento en la Feria Internacional del Libro de Quito, en junio de este año. Actualmente el catálogo editorial consta de tres títulos: Los melancólicos, de Sandra Araya; Altanoche, de Andrés Cadena, y Frankenstein, de Mary Shelley (en su idioma original). La idea es reforzar el repertorio con obras nacionales, clásicos y títulos que se consideren imposibles de encontrar. (I)