El argentino Mateo Sujatovich viene de un respetado linaje musical en su patria. Su abuela fue maestra de piano del legendario Charly García, su padre es uno de los tecladistas más destacados del rock argentino y su hermana es una reconocida concertista; sin embargo, pese a tener un camino más cercano a la música, eligió el fútbol y la guitarra como un acto de rebeldía.