Tras su estreno en 1961, la película original de West Side Story fue proclamada casi instantáneamente como un clásico, al transformar el Romeo y Julieta, con una escena de balcón, en la historia de Tony y María, señala una reseña de la BBC. Similar a la obra de Shakespeare, WSS relata el romance de dos jóvenes amantes de comunidades étnicas enfrentadas en un Nueva York que se desmorona.

El remake dirigido por Steven Spielberg, que se estrenó el 9 de diciembre, se perfila como una de las favoritas para la temporada de premios. En la gala de los Globos de Oro este domingo compite en las categorías Mejor película de comedia o musical; Mejor director; Mejor actriz de comedia o musical y Mejor actriz de reparto. También despuntó a Ansel Elgort y Rachel Zegler no solo como los protagonistas de la puesta en escena, sino en lo que ha sido hasta ahora el papel de sus vidas.

El debut de Rachel Zegler, quien tiene origen colombiano

Rachel Zegler es una actriz y cantautora colombiana-estadounidense de 20 años de Nueva Jersey. Tras protagonizar West Side Story, Rachel se prepara para otro estelar: Blancanieves, la adaptación de la película animada de Disney con actores reales.

Aunque es una recién llegada a la industria del cine, Zegler no es ajena al papel de María, habiendo interpretado por primera vez al personaje en una presentación de la Escuela de Artes Escénicas en el Centro de Artes Escénicas de Bergen.

A lo largo de su adolescencia, Zegler ha protagonizado producciones locales, regionales y escolares de Millie, una chica moderna, y los musicales La Calle 42 y Rent, además de trabajar ocasionalmente como cantante de bodas.

Zegler fue una de los 30.000 aspirantes al rol para el musical de Bernstein junto con Ansel Elgort, como Tony. Solicitó el papel después de ver un anuncio de casting en Twitter requiriendo actores latinos y latinas.

“Como mujer colomboamericana que crece en esta época, los roles fuertes como el de María son muy importantes. Ser capaz de darle vida a ese papel, un papel que significa mucho para la comunidad hispana, es una lección de humildad“, escribió en ese momento en su perfil de Instagram.

La polémica de Ansel Elgort

Asumir el papel de un personaje icónico como Tony es una enorme tarea, especialmente cuando actores de la talla de Larry Kert (1930-1991) y Richard Beymer (1939) han hecho suyo el papel en Broadway y en el cine. Pero Ansel Elgort ha asumido ese peso con orgullo y confianza en la adaptación del musical de Steven Spielberg, llevando a Tony a una audiencia moderna.

En 2019, Ansel Elgort habló sobre la reacción emocional que tuvo al ser elegido, cuyo casting se anunció un año antes (a través de The Hollywood Reporter). La estrella de Bajo la misma estrella (2014), Divergente (2014) y Baby: el aprendiz del crimen (2017), fue el primero en ser escogido.

“Ya había estado haciendo muchas audiciones en ese momento y había estado luchando por este papel”, explicó en ese momento. “Su tono daba a entender que tal vez no iba a conseguir el papel”, reveló el actor refiriéndose a Spielberg cuando el director le dio la buena noticia. “Estaba tan feliz y no podía decirle a nadie”, continuó Elgort. “Pero llamé a mi mamá y a mi papá y lloré un poco, lo cual fue genial”.

En cuanto a lo que realmente fue trabajar con Spielberg, el actor no pudo contener su entusiasmo. “Es increíble. Me pellizco constantemente cada vez que hablo con él y él me dirige”, dijo.

Cuando fue llevada al cine por primera vez, hace 60 años, la historia sobre jóvenes amantes de bandas rivales se contó con actores blancos con rostros maquillados para retratar personajes puertorriqueños. Si bien es cierto que el elenco de Spielberg está liderado por latinos, la propuesta no ha escapado a las controversias en el reparto.

Las acusaciones existentes contra el actor Ansel Elgort resurgieron antes del lanzamiento de West Side Story. Elgort, quien interpreta a Tony, fue acusado en 2020 de agredir sexualmente a una joven de 17 años en 2014. Él negó la acusación en las redes sociales y, en su lugar, describió su relación como “enteramente consensuada”.

Cuando se formularon las acusaciones, ya habían pasado unos ocho meses desde que terminó la filmación, por lo que la producción ni la dirección emitieron comentarios. (E)