En contraste con actores como Pedro Pascal y Samuel L. Jackson, que no tocaron el éxito en la industria cinematográfica hasta relativamente tarde en sus carreras, Paul Mescal ya tiene una nominación a un premio Óscar, a la categoría de mejor actor protagonista por su papel en Aftersun. Mescal, de 27 años, había estado en apenas 3 películas y dos series televisivas antes de ser nominado por la Academia, que le entregó el Óscar a mejor actor a Brendan Fraser el pasado 12 de marzo.

El actor originario de Irlanda no siempre estuvo interesado en actuar. Su primer amor fue el fútbol gaélico, deporte similar al balonmano, que es muy popular en Irlanda y en Escocia. Una lesión de mandíbula lo alejó del deporte, y pronto empezó a actuar: se inscribió en un conservatorio, seguido de sus primeras incursiones en el teatro. Consiguió roles en obras presentadas en Dublín y Londres.

Luego tuvo su debut actoral en televisión en la serie Gente normal. El show se estrenó al comienzo de la pandemia de COVID-19. Mescal interpretó a un encantador alumno de secundaria, papel que lo convirtió rápidamente en una estrella en ascenso y le valió un premio BAFTA, los premios de la academia británica de cine, en la categoría de mejor actor.

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La repentina ascendencia de su carrera lo sorprendió: Mescal no se esperaba ganar un premio BAFTA. Ni siquiera había preparado un discurso por si le entregaban el premio, y se subió al escenario a recibir el galardón obligado a improvisar sus palabras.

Sí tuvo un discurso preparado por si ganaba el Óscar, aunque admitió que nunca esperó resultar victorioso. “No voy a ganar”, le confesó el irlandés a la revista ES. “Básicamente puedo relajarme y disfrutarlo”. En la misma entrevista, sin embargo, reveló que de vez en cuando cae en cuenta del peso de haber sido nominado a un premio Óscar. También indicó que esperaba que Colin Farrell, nominado por Almas en pena en Inisherin, se lleve la estatuilla, y que piensa enmarcar el discurso de emergencia que tenía preparado “después de nunca tener que usarlo”.

La competencia del actor irlandés en la categoría de mejor actor protagonista fue fuerte. Además de Farrell, se enfrentó a actores como Fraser, que ha revitalizado su carrera tomando proyectos de películas de autor como La ballena, por la cual se llevó el premio, y a Austin Butler, nominado por su rol protagónico en Elvis, la película biográfica del rey del rock and roll, Elvis Presley.

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Aunque fue el menos opcionado para ganar el Óscar, Mescal tampoco se quedó atrás: su papel en Aftersun fue ampliamente alabado por la crítica. El periódico francés Le Monde, por ejemplo, calificó la actuación de Mescal como “magnética”, y se deshizo en elogios por la película, que explora la relación entre Calum, un joven padre divorciado de alrededor de 30 años (interpretado por Mescal) y Sophie, su hija de 11 años, durante unas vacaciones de verano.

Aftersun ha sido elogiada como un largometraje reminiscente de otra época, pues es lento y sin grandes trazos de conflicto explícito, pero que al mismo tiempo desafía las nociones antiguas sobre la paternidad, pues Calum no es el típico padre duro, inflexible e inmune a sus propias emociones. Es un padre cariñoso, aunque esconde su depresión de su hija.

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“Sueles ver a padres ausentes en dramas tradicionales, y piensas ‘Oh, va a tener un momento de epifanía’. En Aftersun, en cambio, Calum es un muy buen padre pero el resto de su vida le cuesta. Por momentos se odia a sí mismo, pero nunca se lo demuestra a su hija, lo cual es dramáticamente muy interesante y triste”, reflexionó Mescal en una conversación escrita para la revista Interview con Dakota Johnson, actriz famosa por su rol protagónico en Cincuenta sombras de Grey y apariciones en cintas como La red social. Johnson fue compañera de set de Mescal en The lost daughter, el primer largometraje del actor ahora nominado al Óscar.

El personaje de Mescal en Aftersun fue un padre precoz, y el concepto de precocidad parece perseguir al actor a través de su carrera. En la primera escena de The lost daughter (también su primera escena en un largometraje), Mescal tuvo que besar a Johnson, situación que le resultó intimidante.

“Por alguna razón, la primera escena que tuvimos que hacer era yo besándote”, recordó Mescal sobre la grabación de The lost daughter en su conversación con Johnson. “Pensé ‘¿qué rayos está pasando?’”.

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Ahora el actor de Gente normal está repleto de trabajo. Próximamente estrenará una nueva película llamada Carmen, dirigida por Benjamin Millipied, esposo de la actriz Natalie Portman y el encargado de las coreografías de la aclamada película El cisne negro.

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En mayo de 2023 también empezará a grabar para Gladiador 2, que está programada para estrenarse a nivel mundial el 24 de noviembre de 2024. Gladiador 2 será la primera película blockbuster (de gran atracción taquillera) en la corta carrera de Mescal. La secuela de Gladiador llegará 24 años después de la primera entrega, protagonizada por Russell Crowe y Joaquín Phoenix.

La cinta original fue nominada a 12 premios Óscar, y ganó en 5 categorías: Crowe se llevó el galardón a mejor actor, y la cinta se llevó las estatuillas a mejor película, mejor diseño de vestuario, mejores efectos visuales y mejor sonido. (I)