House of Gucci, el thriller dirigido por Ridley Scott, y basado en el asesinato del nieto del fundador de Gucci, Maurizio Gucci (Adam Driver), por orden de Patrizia Reggiani (Lady Gaga), aunque logró situarse como la tercera película más taquillera en Estados Unidos, el fin de semana de estreno, con una recaudación de 22 millones de dólares según publicó el diario Chicago Tribune, ha despertado el descontento de la familia Gucci. Las críticas de la dinastía familiar se han dado al parecer por el elenco y la supuesta falta de transparencia de los realizadores.
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Poco después del estreno, algunos integrantes de la familia emitieron un comunicado para expresar su inconformidad con la película a la que catalogaron de “extremadamente dolorosa desde el punto de vista humano y un insulto al legado sobre el que hoy en día se erige la marca”.
El documento afirma que la producción no consultó con los herederos antes de representar a Aldo Gucci, presidente de la compañía durante 30 años, y a los integrantes de la familia como unos matones e insensibles al mundo que los rodea.
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“Estamos francamente decepcionados. Hablo en nombre de toda la familia. Están robando la identidad de una familia para sacar provecho, para aumentar los ingresos del sistema hollywoodense… nuestra familia tiene una identidad, una privacidad. Podemos hablar sobre cualquier cosa. Pero hay líneas que no se pueden cruzar”, aseguró Patrizia Gucci, prima segunda de Maurizio.
Patrizia Gucci, autora de la biografía de su familia e hija de Paolo Gucci, aseguró: “En la familia estamos seguros de que el filme tendrá errores e imprecisiones que no tienen que ver con la verdad histórica”, en declaraciones publicadas por los medios locales. Y agregó: “Por lo que sabemos, se realizará comprando los derechos de un libro de una periodista británica, un trabajo que consideramos absolutamente sin fundamento. Ni Ridley Scott ni nadie nos ha avisado y lo sentimos”.
Las críticas llegan incluso de la propia Reggiani, en libertad desde 2017. “Está muy disgustada porque decenas de camiones de la producción han invadido Milán y ella no sabe nada ni se han puesto en contacto con ella”, dijo a Telelombardía su abogado, Daniele Pizzi. También reprocha que Lady Gaga no haya querido reunirse con ella para preparar el personaje.
Tom Ford, diseñador que trabajó cuatro años en la firma y que aparece en el filme representado por el actor Reeve Carney, sostuvo: “En muchos momentos me reí a carcajadas, ¿pero se suponía que eso era lo que debía suceder? Después de ver La casa Gucci estuve profundamente triste varios días, algo que creo que nos sucederá a los que conocimos a esos protagonistas y esos acontecimientos. Me resultó complejo ver el humor y el tono camp a partir de algo que fue tan sangriento”, reseña una publicación de El Nacional en su sitio web. (I)