La Armada es parte de Fuerzas Armadas, organizada para salvaguardar la vida humana y controlar sus actividades en el mar, a fin de contribuir al ejercicio soberano de nuestras leyes y defender el territorio. Para cumplir su misión forma marinos profesionales con disciplina, principios y valores, dentro de una doctrina naval-militar guiada por la democracia y derechos humanos; además, mantiene y requiere de naves equipadas.

Actividades ilícitas, como el narcotráfico, la pesca ilegal no reglamentada o no declarada y la piratería, deben ser neutralizadas. Existen políticas y estrategias como “el triángulo de seguridad”, implementada por el Ministerio de Defensa el 24 julio de 2020, o el apoyo de Estados Unidos en exploración aeromarítima.

El narcotráfico es la mayor amenaza porque su poder económico y política de miedo “plata o plomo” corrompen autoridades debilitando gravemente al Estado, recluta gente de mar, incorpora buques de carga, pesqueros, lanchas rápidas y semisumergibles. Continuamente se publican noticias sobre capturas de toneladas de droga en ciudades, puertos y mar, así como en puertos extranjeros camuflada dentro de contenedores de productos de exportación como banano, pescado, camarón o frutas, ocasionando grave desconfianza en los mercados internacionales.

La pesca ilegal en embarcaciones no registradas, sobrepesca no declarada y pesca de especies protegidas es una amenaza al ecosistema marino y seguridad alimentaria, no solo del país. La presencia anual de una gran flota pesquera de diferentes banderas en la frontera marítima, en aguas internacionales según la Armada que está en permanente vigilancia, prende alarmas sobre la probabilidad de que ingresen a nuestras aguas; un caso fue la captura del buque chino Fu Yuan Yu Leng 999, en el año 2017. El Gobierno está realizando gestiones con los países que abanderan la flota, para el control de la pesca; ojalá tengan éxito.

La Armada tuvo una participación exitosa en la llamada “guerra del atún” contra las flotas pesqueras atuneras de Estados Unidos, a pesar de la presión gubernamental develada años más tarde cuando se filtró información confidencial de WikiLeaks: por ejemplo, el cable 1974STATE077807 del 17 abril 1974, enviado por Henry Kissinger a la Embajada en Quito: “No deseamos un acuerdo de asociación hecho bajo el término de las leyes ecuatorianas. Si esto ocurre, el Gobierno de Ecuador podría interpretar que estamos de acuerdo con todo su sistema jurídico”.

La piratería es una actividad que afecta la vida de pescadores y familias, los casos que se presentan son atendidos con el mejor esfuerzo posible.

Con la nueva Ley Orgánica de Navegación, Gestión de la Seguridad y Protección Marítima y Fluvial en los Espacios Acuáticos, la Armada retoma la autoridad marítima; durante una socialización virtual el Ministerio de Defensa indicó que ejecutará encuentros en mesas de trabajo con sectores que realizan actividades en el mar, para elaborar los reglamentos.

Soplan nuevos y refrescantes vientos cuando nuestra gloriosa Armada Nacional, este 25 de julio, cumple su octogésimo aniversario, siempre presente en el control del mar. (O)