Hoy debía ser un día de descanso y fiesta del civismo por Guayaquil, hoy es su celebración, pero todos están en trabajo, estudio, ocupaciones. ¡Viva Guayaquil! A nadie le gusta que lo celebren otro día que no es el de su cumpleaños. Dicha mala práctica la impuso un gobierno de ingrata recordación para que existan feriados, puentes vacacionales de tres días, cinco días, en las fiestas cívicas, históricas. Fomentan vagancia.

Los muchachos se alegran en los feriados porque se van de paseo, al campo, la playa, al mall, al cine; no saben el significado de la celebración de la fecha cívica. Ojalá supriman los feriados y celebremos las fiestas el día que les corresponde. (O)

Enma Aráuz, Guayaquil