Cambió la vida sentimental de las parejas, las que gozaban viviendo juntos. La convivencia en la pandemia sacó a flote las diferencias, los conflictos durante el encierro, el aburrimiento.

De otro lado, las parejas que vivían separadas se fortalecieron, hubo en ambas partes constancia, sacar adelante la relación a distancia por videoconferencias. (O)

Giulianna Anahí Sghirla Ayala, Quito