Se conoce que ayuda a prevenir contagios el uso de mascarilla, lavado de manos, distanciamiento, no salir mucho a la calle; pero si contraen el virus, unas personas no sabrían qué hacer en casa. (I)

Margoth Rivera
En el feriado se olvidaron las medidas. Los padres salieron con los hijos, los amigos tomaron cafés, comieron afuera, en casas. Las distancias, mascarillas, no se usaron para hablar y abrazar a los amigos, parientes; en reuniones no se piensa en el virus ya que hay tanto que contarse con las amistades.
No estamos listos para pensar cómo hacer si nos enfermamos, a quién llamar, qué tener en la casa, tal vez un tanque de oxígeno, nebulizador, aspirinas, guantes, un cuarto y un baño solo para el enfermo; un lavadero o lavacaras solo para lavar ropa, sábanas, toallas, y utensilios del enfermo; dinero guardado para gastos médicos y clínica; tal vez una silla de ruedas; tal vez consumir más verduras. No sé. Todos dicen no iré a hospitales por miedo a morir solo, prefiero morir en casa; convalecer en mi cama... (O)

Gian Marcos Cevallos
Tratar el COVID-19 a futuro, como un supuesto, sería erróneo. A pesar de creer tener los medios no solamente económicos sino insumos y suplementos (sean de cuidado, alimentación, entre otros), los resultados que el virus genera no se pueden tratar de una sola manera.
El virus puede atacar como dé la gana, no se puede frenar las muertes. ¿Si mi familia está preparada en cuidados, insumos, alimentación, medicina? La respuesta es temo que no. (O)

José E. Ortoneda
En cuanto a cuidados, alimentación, etc., para tener la esperanza de no contagiarnos, sí estamos preparados; sin embargo, el riesgo está latente porque en cualquier momento uno se puede contagiar al salir a trabajar, en el transporte, el supermercado, etc.; y en ese caso sería interesante saber ¿si el Gobierno en sus casas de salud nos podrá dar asistencia, atención médica y otros menesteres? El COVID-19 es como sacarse ‘la lotería’, en cualquier momento se pega por más cuidado que tengamos. Solo resta esperar que la vacuna salga pronto y encomendarnos a Dios.(O)

Mercedes María de Reyes
Quién sabe: conseguir un buen médico, que sea humano, que podamos llamarlo a cualquier momento que nos recete por teléfono, controle todo el tiempo de sufrir este virus en la casa.
Averiguar qué laboratorios mandan a las casas a realizar exámenes a los que están contagiados, cuánto cuesta. (O)