El Gobierno central afronta problemas económicos por la caída del precio del petróleo y la escasa tributación durante la pandemia. En consecuencia, se incumplen transferencias y asignaciones.

Entre los afectados se encuentran los municipios, que padecen falta de liquidez y cuyas necesidades son, en resumen, las de los ciudadanos de cada uno de los cantones que conforman el Ecuador.

Ayer, el Comité Ejecutivo de la Asociación de Municipalidades de Ecuador (AME), integrado por alcaldes de varias localidades del país, fue recibido en el palacio de Carondelet por el presidente Lenín Moreno y varios ministros. La cita se dio tras el pedido de la alcaldesa Cynthia Viteri de que se le entreguen a Guayaquil unos $130 millones por concepto de rentas e IVA adeudados desde marzo y del anuncio de la AME de que presentaría una acción de protección para exigirle al Gobierno el pago de rentas.

En la reunión, las municipalidades solicitaron la condonación de parte de las deudas que tienen con el BDE, la generación de un crédito bilateral para atender la realidad que atraviesan por la pandemia del COVID-19 y la coordinación para el acceso a una vacuna contra el virus en todos los municipios del país.

El Gobierno descartó la condonación y anunció que este mes pagará $82 millones de la deuda que mantiene con las 221 alcaldías por concepto de transferencias mensuales, y que procederá a un “recálculo” para los siguientes pagos, por la caída abrupta de ingresos. Para agosto se ha programado el pago de una cifra similar y, para ello, está prevista una reunión más, la próxima semana.

Si bien es comprensible la posición del Gobierno central por la dificultad para conseguir liquidez, no es menos comprensible la situación que afrontan las municipalidades por falta de recursos para cubrir los gastos que demandan las competencias a su cargo. Como nunca antes, de parte y parte, se requerirán objetividad y buena voluntad para un entendimiento apegado a la realidad. (O)